Intel ha anunciado finalmente el rumoreado —y esperable— Core i9-14900KS, una versión con las frecuencias un poco más subidas que las del Core i9-14900K. La configuración de núcleos es la misma, con ocho núcleos P con multihilo y dieciséis núcleos E, para un total de treintaidós hilos de ejecución. Es una versión con la curva de voltaje desplazada para que pueda llegar a los 6.2 GHz de turbo máximo manteniendo el consumo máximo de 253 W.
Eso sí, el consumo a frecuencia base, que sigue siendo de 2.4 GHz para los núcleos E y de 3.2 GHz para los núcleos P, es de 150 W en lugar de los 125 W del 14900K, así que de entrada hay una importante subida de consumo por la parte de la curva, aunque luego por la alta siga siendo similar. La frecuencia máxima de los núcleos E pasa a ser de 4.5 GHz, apenas 100 MHz más. La iGPU se mantiene igual, en los 1650 MHz.
El precio del procesador es de 689 dólares, frente a los 589 dólares del 14900K, por una mejora de rendimiento que poco se va a notar en juegos. Como siempre, es una edición especial para la gente que tenga dinero que quemar. Apenas se gana un 2 % más de rendimiento con una RTX 4090, y la temperatura de funcionamiento sube como 15 ºC. Es que para esta mierda mejor te compras un Ryzen 7 7800X3D, más barato y mejor en juegos. Es un procesador cuya existencia no tiene sentido.