Los contenidos originales de Netflix están siendo, salvo contadas excepciones, todo un éxito pero, por mucho que le pese a la web de video bajo demanda, no es la propietaria de los mismos. Es por ello que alguna de sus series se ha podido ver en servicios de la competencia, como Amazon Prime Video.
Los responsables de la web están tomando acciones para corregir esta situación, por lo que van a asumir la propiedad y la producción de sus contenidos originales. Esto permitiría que controlar dónde se emiten las series y recibir su parte de los beneficios si estos se licencian o venden en DVD o video digital. Además, tendrían derechos mundiales sobre los contenidos, lo cual sería un avance a la hora de expandirse a nuevos países, garantizando que sus series sólo se pueden ver a través de ellos.
Obviamente esto tiene desventajas, pues asumen más riesgos en caso de que un producto no funcione y no recupere la inversión hecha en su producción. En el caso de las series en curso esto puede ser bastante complicado. Por poner un ejemplo, es dudoso que Disney/Marvel cedan los derechos de Daredevil. Pero las series que debuten en el futuro cercano son otra historia.
Una de las primeras series que puede ser propiedad de Netflix es Flaked, que Will Arnett (GOB en Arrested Development), está preparando, aunque no se ha realizado una confirmación oficial. También puede darse el caso en que algunas productores decidan dejar de vender a la cadena sus series. En todo caso, habrá que ver si este paso les permite competir con HBO, Showtime o AMC. Pero son los riesgos que hay que correr cuando quieres ser un proveedor a nivel mundial.
Fuente: Bloomberg.