China, de unos pocos años a esta parte, se está convirtiendo en un mercado muy importante para las películas estadounidenses. De hecho, varios estudios han llegado a acuerdos de producción con estudios de dicho país para estrenar sin las restricciones del gobierno a las películas extranjeras.
El gran estreno de Disney durante 2017 fue Los últimos Jedi, película que aún sigue en cartel en todos los mercados importantes, menos en China. En el país asiático la octava entrega de la saga galáctica que comenzó Lucas en 1977 se estrelló en la taquilla en solo dos fines de semana, lo que motivó que el estudio retirase la cinta de todas las salas en las que se proyectaba.
El siguiente lanzamiento de la franquicia será Solo: Una historia de Star Wars, la cual será estrenada a finales de mayo. Para tratar de evitar que esta película se vea lastrada por el fracaso de Los últimos Jedi en China, los ejecutivos de Disney habrían decidido cambiar su título por Ranger Solo.
Si este cambio servirá para que recaude en el Reino Medio más de 41 millones de dólares, dependerá de que la película tenga unos mínimos de calidad. Aunque la crítica haya estado encantada con Los últimos jedis, la opinión del público en todo el mundo, especialmente en China, no ha sido tan favorable.
Vía: Comic Book Resources.