Han tenido que pasar dieciocho años para saber qué le pasó a Neo y a Trinity tras ese final abierto que dejaba la tercera entrega. Anticipo que esta última secuela sigue dejando margen a continuar explotando la franquicia. Entiendo que lo que acabo de mencionar no es un destripe, pero si lo consideras como tal, puedes estar tranquilo, porque el resto de la crítica está completamente libre de ellos.
De hecho, apenas voy a revelar nada del argumento y me voy a centrar más en resolver la duda por la cual la amplia mayoría de la población consulta críticas de cine: si merece la pena invertir tiempo y dinero en verla.
El regreso del elegido: una película para el disfrute de fanáticos y nostálgicos de Matrix
Haré una pequeña confesión y es que la saga de Matrix siempre estará entre mis favoritas porque cuando era un chaval, formé parte de un equipo que estuvimos promocionando el videojuego por varios centros comerciales de la ciudad donde vivo, haciendo exhibiciones de artes marciales. Aun así, no soy un fanático de la saga y del universo creado por las hermanas Wachowski. La primera película me gustó mucho, tanto por la novedad que introdujo en el plano de la ciencia ficción, como por las escenas de acción, su banda sonora y los efectos especiales.
Las siguientes dos secuelas me dejaron bastante más frío y concretamente la tercera más que la segunda. Los efectos especiales, las escenas de acción e incluso la música seguían teniendo mucha calidad, pero me faltaba argumento. Las películas contaban más de la historia del mundo pero no notaba una novedad que me resultara particularmente emocionante. Para esta cuarta secuela, resumiendo, me ha vuelto a pasar prácticamente lo mismo.
Las escenas de acción siguen siendo de buena calidad (aunque no las disfruté tanto como las de la primera) y Neo sigue sabiendo kungfú. Las artes marciales y concretamente ese kung-fu que se vale de cables para realizar movimientos espectaculares y que empezó a pegar fuerte en Hollywood a finales de los 90, han tenido un papel de relevancia en la saga de Matrix. Este papel de relevancia vuelve a notarse, aunque ahora incluye otros tipos de lucha más cercanos a otra saga también protagonizada por Keanu Reeves: John Wick.
Reeves es un apasionado de las artes marciales, no las practica por el mero hecho de necesitarlas para interpretar a sus personajes, y se nota una evolución clara en su conocimiento. Para completar la lucha cuerpo a cuerpo, sigue habiendo muchos disparos, vehículos de todo tipo, explosiones y cuanto caracteriza a la saga, con el añadido de las mejoras propias de los avances tecnológicos.
La ausencia de un argumento de calado es bastante significativa, al margen de las explicaciones que detallan en qué punto se encuentra Matrix. Si con las películas anteriores notaste ese dolorcillo de cabeza por no entender nada de lo que estaba pasando, con esta lo vas a tener más todavía.
En resumen, es más de lo mismo pero introduciendo nostalgia y referencias de la primera película y un punto romántico (¿ñoño?) que seguro buena parte de los fans de la saga agradecerán muchísimo.
¿Merece la pena ver The Matrix Resurrections si no has visto o no eres fan de las películas anteriores?
Los no tan fans podrán abstraerse de otros asuntos y disfrutar de la acción sin dedicarse a pensar mucho. Digamos que la acción sigue siendo lo suficientemente buena como para permitir a los no fanáticos soportar una película de dos horas y media, con un argumento muy banal, sin morir de aburrimiento.
Diría que incluso sin haber visto ninguna de las anteriores películas se puede disfrutar de Matrix Resurrections si eres aficionado a las películas de acción. Por otro lado, si eres de esas personas a las que les cuesta entender la ciencia ficción donde aparecen realidades difusas o sentiste momentos de vértigo por incomprensión en entregas anteriores, te recomiendo que no intentes entenderla y te limites a disfrutar del espectáculo.
La pregunta que quedaría por contestar es si merece la pena pagar por verla en una pantalla de cine. En cierto sentido ya la he contestado al hablar sobre las escenas de acción, y es que en este tipo de películas se agradece especialmente el poder disfrutar de una buena pantalla y un buen sonido. Me atrevería incluso a afirmar que en este caso habrá gente que únicamente podrá disfrutarla si la ve en el cine… y es que si la acción es lo que sustenta tu interés por la película y le quitas el gran porcentaje de la espectacularidad que da la gran pantalla, seguramente no aguantarás sus dos horas y media.