Los chicos de marketing de Samsung han vuelto a la senda de atacar a los productos de Apple para promocionar los suyos. Algo que no les ha servido para mejorar las ventas del Galaxy S4, pero que por alguna extraña razón no dejan de hacer. Tampoco es el primer ataque en el sector del marketing que ha recibido el iPad Air por la resolución de pantalla, puesto que Amazon hizo lo mismo en diciembre.
Le veo dos fallos fundamentales a la comparación del Galaxy Note 3 y el iPhone 5S: que está comparando peras con manzanas. Literalmente. Está comparando una phablet de 6 pulgadas con un teléfono de 4 pulgadas. Podría también reírse del tamaño del Galaxy S4 con sus 5 pulgadas de pantalla, por ejemplo. La segunda, que está promocionando un producto del sector de las phablets como si fuera un teléfono normal pese a que en el anuncio lo usa como tableta. Cuanto menos publicidad engañosa.
El anuncio del Galaxy Tab Pro 10.1... Bueno, se ríe del anuncio del "lapicero" del iPad Air en el que la voz en off se la ponía el protagonista de Breaking bad. Compara directamente el grosor y asegura que es más fino. Vale, 7.3 frente a 7.5 milímetros. Ok, creo que por ello estoy seguro de que mañana mismo me compro el Tab Pro... ¿Hay alguna diferencia entre una pantalla de 2560 x 1600 píxels frente a una de 2048 x 1536 píxels? Ninguna para nuestros ojos, pero sí para la duración de la batería. El iPad Air puede durar hasta 15 horas de reproducción de contenido multimedia y uso en general, frente a las 9 horas del Galaxy Tab Pro 10.1. Bueno, también es cierto que el iPad Air cuenta con una batería de 11.620 mAh frente a una de 8.220 mAh del Galaxy Tab Pro, y eso en el mismo tamaño y grosor sale claramente beneficiado el iPad Air.
Samsung se está pegando unos tiros en el pie en el sector publicitario bastante interesantes, que están hechos claramente para intentar captar a ese sector de la población que odia a Apple. Pero ese sector de la población también odia a Samsung por sus últimos movimientos y productos que dejan mucho que desear, por lo tanto, en la práctica, deberían despedir a toda su plantilla de marketing y contratar gente nueva.