Un problema común a todas las tiendas de aplicaciones es el de las aplicaciones que intentan hacerse pasar por otras para que los usuarios se las descarguen. Si buscas Flappy Bird o Swing Copters, hay posibilidades de que incluso te aparezcan como primer resultado un clon en vez de la real.
Microsoft ha empezado a mover ficha para zanjar antes de que se convierta en un mal endémico de la Windows Store. Ha cambiado las normas de uso para expulsar los clones de la tienda de aplicaciones, con las primeras 1.500 aplicaciones eliminadas. Además ha prometido añadir más recursos al proceso de aprobación de aplicaciones para que sea más rápido. Como dicen en GigaOM, ya no hay por ejemplo clones de Candy Crush o VLC. Buenas noticias para el creciente número de usuarios de Windows Phone.
Vía: GigaOM.