El ritmo de adopción de iOS 8 no está avanzando tan rápido como lo hizo iOS 7, pero también es cierto que había bastante menos expectación por esta versión. Al fin y al cabo, con iOS 7 llegó un cambio de look completo, y eso llamó poderosamente la atención de los usuarios, que muchos llevaban viendo el mismo aspecto desde hacía siete años.

Eso en términos modernos, con la tendencia a los colores planos y texto nítido, es mucho tiempo. Finalmente en las últimas cifras proporcionadas por Apple de distribución de versiones de los dispositivos que acceden a la App Store, iOS 8 ha llegado al 52%, con iOS 7 quedándose con el 43% y el resto de versiones relegadas al 5%.

Es importante que los usuarios se actualicen debido a que se cierran fallos de seguridad de una versión a otra, pero también se añaden nuevas APIs con las que los desarrolladores pueden crear aplicaciones más potentes. Por ejemplo, sin iOS 8 no se pueden acceder a widgets o HealthKit, pero tampoco a utilizar Touch ID para desbloquear sitios de terceros en sustitución de nuestro usuario y contraseña.