Samsung es una empresa con multitud de filiales, y cuando una va mal, las otras tienen que mejorar a la fuerza. Es lo que ocurre con Samsung Electronics con las bajas ventas de sus teléfonos inteligentes que casi produce un terremoto durante 2014 en la propia compañía. Las filiales de fabricación de componentes van a llegar al rescate de la empresa matriz.
A los rumores de que Samsung será el fabricante mayoritario de diversos componentes diseñados por Apple para el iPhone 6s (incluido su procesador), se unen hechos como que Samsung Display ha invertido 3.600 millones de dólares en una nueva fábrica de pantallas OLED. Los displays que salgan de estas fábricas estarán destinados a dispositivos de tamaño mediano y pequeño que fabrique Samsung Electronics, posiblemente en referencia a teléfonos y dispositivos vestibles.
Pero en un futuro cercano quieren también poner a disposición de terceros las líneas de producción de la nueva planta, intentando generar nuevos ingresos para intentar paliar la bajada de ventas de teléfonos. Por otro lado, Samsung también comenzará a construir una nueva planta de fabricación de chips en Corea del Sur, que costará a la compañía en torno a los 9.000 millones de dólares.
Fuente: Reuters.