Acer ha presentado nuevos modelos de portátiles para juegos para complementar su gama Predator, y en otros rangos de precio y con otras características. El Aspire V Nitro Black es una renovación de y estará disponible en modelos con pantalla de 15.6 o 17.3 pulgadas, con opciones de FHD y 4K UHD, e incluye la tecnología de seguimiento ocular Tobii en el modelo de 17 pulgadas.
El procesador es un Core i7-7700HQ, acompañados de gráfica GTX 1050 Ti de 4 GB o GTX 1060 de 6 GB, con 16 GB de memoria DDR4 —configurable con hasta 32 GB—, SSD de tipo SATA 3 o PCIe, y un disco duro de hasta 2 TB. Incluye una fuente de 52.5 o 70 WHr, e incluye una fuente externa de 150 W o 180 W, con un peso de 2.5 a 3.2 kg, según modelo.
Dispone de un puerto Thunderbolt 3 con conector USB tipo C, dos USB 3.0, dos USB 2.0, un HDMI, wifi 2x2 802.11 ac, Bluetooth 4.2 y Ethernet. En la esquiena superior izquierda del panel táctil incluye un lector de huellas compatible con el desbloqueo de Windows Hello. También dispone de mejor audio con Dolby Audio Premium y sistema TrueHarmony Plus de Acer.
Estará disponible en febrero desde los 1299 euros por el modelo de 15 pulgadas y desde 1399 euros por el modelo de 17 pulgadas.
Por otro lado, el Aspire VX 15 intenta cubrir una gama en la que Acer no se había metido en los portátiles para juegos. Incluye una pantalla de 15.6 pulgadas 1080p de tipo IPS, procesadores Core i5-7300HQ o i7-7700HQ, GTX 1050 o 1050 Ti de 4 GB, 8 o 16 GB de DDR4 en dos ranuras SODIMM, de 128 a 512 GB de SSD, y disco duro de 1 TB.
La conectividad reside en un puerto USB 3.0 tipo C, dos USB 3.0, un USB 2.0, lector de tarjetas SD, un HDMI, wifi 802.11 ac, y Bluetooth 4.2. La batería es de 52.5 WHr, tiene un peso de 2.5 kg con 28.9 mm de grosor. Cuenta con sistema Dolby Audio Premium y sistema TrueHarmony Plus de Acer.
Estará disponible en enero por 899 euros.