Julian Assange sigue refugiado en la embajada de Ecuador en Londres, país al que había pedido asilo político. Sus problemas con la justicia comenzaron en 2010 cuando se presentaron dos cargos por agresión sexual, algo que ha negado reiteradamente.
A principios de 2016, el Grupo de Trabajo sobre las Detenciones Arbitrarias de la ONU sobre el caso Assange, al que había apelado Assange por considerar que estaba ante una detención arbitraria. Desde que Ecuador le concedió asilo, Assange no ha podido abandonar la embajada para viajar al país sudamericano, pues hay una orden de arresto contra él, al haber concedido las autoridades británicas su extradición a Suecia.
Aunque la ONU falló a su favor, la fiscalía de Suecia ha indicado que la decisión de la ONU no tiene ningún impacto en el caso, mientras que la policía británica remarcó que, si abandonaba la embajada de Ecuador, procedería a arrestarle. La situación de Assange puede cambiar, tras la última actuación de la fiscalía sueca.
La fiscal jefe de Suecia, Marianne Ny, ha anunciado que ha retirado los cargos de violación presentados contra Julian Assange. También se ha retirado la orden de arresto. Aún no está claro qué pasará a continuación, pues aún cabe la posibilidad de que Reino Unido pueda extraditarle a Estados Unidos, ya que han reiterado que lo arrestarán si sale de la embajada de Ecuador. No obstante, no han indicado si Estados Unidos ha solicitado la extradición.
Vía: The Next Web.