Alphabet es una de las muchas empresas que se han lanzado a explorar la viabilidad comercial del reparto de mercancías mediante drones. Enmarcado dentro de Project Wing, la compañía ha comenzado a probar el reparto de burritos y de medicamentos en Australia, tratando de descubrir como gestionar eficientemente un servicio de este tipo.
El codirector de Project Wing, James Ryan Burgess, ha anunciado que las pruebas se realizan en colaboración con la cadena de comida mexicana Guzmán y Gómez, y con la de farmacias Chemist Warehouse. El reparto se está haciendo en zonas rurales del país, a usuarios que están a cuarenta minutos en coche del restaurante o farmacia más cercanos.
Las pruebas se realizan para que los sensores de los drones puedan aprender a reconocer mejor los obstáculos, evitando colisiones. Además, la combinación del reparto de alimentos y medicinas sirve, entre otras cosas, para comprobar cuántos productos se pueden embarcar en cada vuelo, tratando de que la comida que se lleve esté caliente al llegar a destino.
Es de suponer, aunque no han indicado nada, que si las pruebas van teniendo éxito, se vayan realizando en otras partes del mundo, especialmente en zonas donde la operación de los drones pueda ser más complicada por el volumen de obstáculos que pueda haber durante el vuelo.
Vía: EnGadget.