Apple ha querido incidir en la seguridad del nuevo sistema de desbloqueo seguro del iPhone X. Cambia de los sensores táctiles de anteriores iPhone, llamado Touch ID, a un desbloqueo facial llamado Face ID. Ha indicado que de una posibilidad entre 50 000 de que alguien al azar desbloquee el teléfono por tener una huella dactilar similar se pasa a una entre un millón. Face ID está diseñado para no ser engañado por imágenes planas y otros métodos triviales de saltárselo.

Sin embargo, la firma de seguridad Bkav ha conseguido engañar Face ID con un método no tan trivial, pero tampoco especialmente complicado de hacer. Teniendo en cuenta que un lector de huella se puede saltar teniendo una copia impresa de la huella del usuario en látex o similar, Face ID también puede ser engañado creando una máscara similar a la del dueño del teléfono.

Eso sí, sale bastante más caro en materiales, con un coste en torno a los 150 dólares, sin incluir la impresora 3D necesaria. Tras escanear la cara del sujeto e imprimir una máscara con sus rasgos faciales básicos, han añadido sobre ella una nariz protésica de silicona, e imágenes en dos dimensiones de la zona de los ojos y la boca. El resultado es que con esta máscara se engaña al iPhone X y se desbloquea.

Según la empresa de seguridad, esto demostraría que el reconocimiento facial sigue siendo inseguro. Bueno, será inseguro si tienes a alguien detrás de ti para sacarte una foto de primer plano de tu cara y dedique el tiempo y esfuerzo para crear la máscara para desbloquear tu iPhone. Pero más bien sería un motivo de preocupación que hubiera alguien que quisiera hacerlo, porque no es un desbloqueo trivial de saltar, ya que requiere horas de preparación.

Vía: EnGadget.