Ya ha pasado mucho tiempo desde el lanzamiento de Windows 10. Tras la reciente actualización, la compañía considera que la base de usuarios es lo suficientemente grande como para no andarse con contemplaciones con los usuarios que aun emplean Windows 7 o Windows 8. Para ello, la compañía les va a dar una última oportunidad para actualizar el sistema operativo.
Aunque las actualizaciones gratuitas finalizaron en julio del año pasado, había un resquicio que se ha aprovechado hasta la saciedad, pues quienes empleasen las características de accesibilidad de versiones anteriores podían seguir actualizando su sistema operativo más allá de dicha fecha. No obstante, este resquicio se va a acabar, ya que Microsoft lo eliminará a partir del 31 de diciembre de este año.
Así pues, los aún indecisos tienen todavía dos meses para hacer la actualización a Windows 10. A partir de dicha fecha, ya tendrán que pasar por caja.
Vía: Slash Gear.