Los auriculares específicos para las consolas cuentan con multitud de modelos, tanto económicos como caros, pero lo que buscan la mayoría de usuarios es un modelo inalámbrico. Conectarlos directamente al mando de la consola no es lo ideal, y algunos modelos terminan desconectándose de vez en cuando o con problemas de sonido.

Turtle Beach tiene modelos que permiten un juego sin interrupciones como el Stealth 600 del presente análisis, que además busca la comodidad y un sonido de calidad. Este último apartado la compañía siempre lo cubre de manera excelente, aunque pueda haber otros apartados peor cubiertos.

Características

La presentación de los Stealth 600 está suficientemente cuidada aunque son unos auriculares de 99 euros. No disponen de bolsa de transporte ni otros extras de auriculares más caros. Los auriculares vienen dispuestos en una bandeja de plástico azul a juego con la plataforma de consola para los que están pensados, junto a un cable micro-USB y el adaptador USB para su uso inalámbrico. Esta adaptador es compatible tanto en Windows como macOS, además de en la PlayStation 4.

La respuesta en frecuencia de los Stealth 600 es entre los 20 y 20 000 Hz, que es la típica y más que suficiente para los rangos auditivos del oído humano. Los transductores son de 50 mm y están hechos de neodiminio, recubiertos de una tela con el logo de Turtle Beach. Las almohadillas están también recubiertas de tela transpirable, aunque no aportan una disminución del ruido ambiente.

La diadema también cuenta con una almohadilla recubierta de tela de buena calidad, y generalmente resultan cómodos una vez que se ajustan con los extensores laterales. En la parte superior de la diadema se encuentra otro logo de Turtle Beach. La combinación de giro de las copas con hasta un ángulo de 90º permiten además que se ajusten lo máximo posible.

En la copa izquierda se encuentra un micrófono desplegable unidireccional de buena calidad, además de los controles de estos cascos. Los botones incluidos son de encendido, control de potenciador de graves/agudos/voces, control del volumen del micrófono y volumen de los altavoces, y el conector micro-USB. También en esta copa dispone de una luz azul que indica si el dispositivo está conectado correctamente con el receptor USB —luz estática— o si lo está buscando —luz intermitente—. La copa derecha carece de ningún control o conector.

Confort y uso

El uso de un adaptador inalámbrico por radio hace que los auriculares se escuchen perfectamente nítidos, evitando los posibles ruidos o bajada de calidad que caracterizan a los auriculares Bluetooth. Además, el sonido de calidad siempre es una cualidad de los auriculares Turtle Beach, en la que la compañía se esmera siempre aunque tenga que recortar en otras características.

Los Stealth 600 disponen de un modo de oído sobrehumano que permite potenciar ciertos tipos de sonidos en juegos, como los pasos de los enemigos, la recarga de armas, desenvainado de espadas, o vehículos que estén muy lejos. Es una característica interesante y que se activa pulsando en el botón de encendido, aunque su utilidad termina dependiendo del juego con el que se utilice. El sonido envolvente que promete Turtle Beach en estos auriculares es resultón, con buena espacialidad, pero obviamente no es un sistema 7.1 o mejor. Aun así, cumplen bastante bien para la tarea de inmersión en juegos.

El botón de ecualización dispone de posiciones para mejorar los graves, graves y sobreagudos, o voces. Son modos preconfigurados que servirán bien en juegos, pero que no le sentará bien a todo tipo de música. Si bien tienen una buena calidad de sonido, está más preparada para los graves de explosiones y efectos de sonido similares de los juegos que para escuchar música, aunque con la configuración base de sonido se escucha francamente bien, y bastante mejor que la mayoría de auriculares con los que compite. En todo caso, música como la de Metallica o Deep Purple salen beneficiados, y no tanto otra como el pop o jazz.

Los auriculares son bastante cómodos en cuanto se ajustan correctamente, y se pueden utilizar sin problemas con gafas, que a la compañía siempre le gusta puntualizarlo en su publicidad. No da la mejor sensación los auriculares recubiertos de tela, pero siendo de buena calidad es bastante preferible a la imitación de cuero que incluyen auriculares más baratos y que terminan desgastándose o rompiéndose rápido. En general, la calidad de construcción de los Stealth 600 es muy buena, aunque los extensores de ajuste resulten un poco demasiado duros.

Stealth 600, auriculares de calidad

Turtle Beach pocas veces —o ninguna— defrauda en el apartado del sonido en sus auriculares, y en los Stealth 600 tampoco lo hace. Cuenta con un sonido de calidad, con la mejora del sonido envolvente, y lo hacen con un sistema inalámbrico fiable. En todo lo que los he probado no he perdido la conexión, y al usar un adaptador USB propio se evitan posible ruidos de otros tipos de comunicación como Bluetooth debido a la codificación que usa.

El apartado de la autnomía de estos auriculares que se recargan por micro-USB es un tema peliagudo. Si bien la compañía anuncia hasta 15 horas de uso, obviamente es un valor bastante menor de lo que proporcionan auriculares para el hogar y para audiófilos, como por ejemplo las 25 horas de los QuietComfort 35 de Bose. Con un volumen normal no he tenido problemas en alcanzar las 12 horas de uso, que es suficiente para una larga jornada frente al televisor con la PlayStation 4, pero igual será insuficiente para jugar delante del PC.

Si te gusta jugar con el volumen bien alto —cosa que no aconsejo en absoluto— la autonomía puede reducirse a las 6 o 7 horas. Los auriculares tienen mucha potencia —y digo mucha, y se podrían usar sin mayor problema como unos altavoces normales debido a ello. Teniendo en cuenta la calidad que tienen de sonido, incluso al máximo volumen no distorsionan nada.

En general, son una gran opción de auriculares inalámbricos para PlayStation 4, que es como los promociona Turtle Beach —y funcionan perfectamente, conectar el USB a la consola y lo reconoce a la primera—, y también para los que lo usen con PC. Buena calidad de sonido, quizás podrían tener una mejor autonomía, pero en general tampoco se puede pedir mucho más por 99 euros.