La criptominería ha hecho este año mucho daño en el sector de las tarjetas gráficas debido al repunte de valor de Ethereum como nueva criptodivisa. Esto ya ocurrió en 2013 con Bitcoin, en el que las tarjetas más potentes de AMD estaban agotadas o a altos precios. Pero según los expertos en economía, las criptodivisas se están convirtiendo en un bien meramente especulativo, y alejado de la intención inicial del que lo inició todo, el hombre tras el seudónimo de Satoshi Nakamoto.
Bitcoin debía convertirse en una divisa y mirar de tú a tú al dólar, al euro o cualquier otra divisa tradicional, pero el aumento de su valor en el último año ha hecho todo lo contrario. Los internautas, en lugar de usar bitcoines para comprar bienes, están optando por guardarlos a la espera de que suban de valor y venderlos. Eso es totalmente lo contrario de lo que debe ser una divisa.
Economistas como Jeffrey Dorfman, columnista y escritor de libros progresista que imparte clases en la Universidad de Georgia, consideran que Bitcoin se está convirtiendo en un bien. Al haber además un valor finito de bitcoines —aunque se tarden décadas en llegar a él—, su valor irá en aumento continuamente, lo que va en contra de lo que debería ser una divisa.
En los momentos en que el valor de una divisa se hace demasiado fuerte, los gobiernos pueden darle al botón de imprimir más dinero para devaluarla. Eso no se puede hacer con Bitcoin, y por tanto se elimina la principal medida de regulación de una divisa. A esto se une las altas comisiones actuales por pagar o transferir bitcoines entre monederos, y la volatilidad de su cotización.
Todos estos parámetros ha llevado a hacer que diversos expertos de Bitcoin lo hayan calificado como un «experimento fallido».
Vía: EnGadget.