Apple ha distribuido nuevas versiones de sus sistemas operativos con correcciones menores, a la vez que sigue el desarrollo de las nuevas versiones mayores de todos ellos que llegarán en otoño. Pero una de esas actualizaciones, la de iOS 11.4.1, añade nuevas trabas para que la policía consiga desbloquear los iPhone cuando incautan uno. Hasta ahora, usaban un aparato que se conectaba al puerto Lightning del móvil para desbloquearlo, pero esta versión de iOS hace que, tras una hora desde el último desbloqueo del teléfono, el puerto Lightning se desactive.
En los ajustes del sistema, bajo Touch ID y código o Face ID y código —según el modelo—, hay una nueva opción que es Accesorios USB. Si se activa, los accesorios USB-Lightning no se podrán usar pasada una hora, lo que llevará a tener que desbloquear el teléfono para usarlos. No afecta a la carga por el puerto Lightning, sino a dispositivos que usen carga y datos —conectarlo a un PC en vez de a un cargador—.
Sin embargo, no todo está perdido para la policía u otras agencias de seguridad estatales. Las cajas que usan para saltarse el pin de los teléfonos a base de fuerza bruta se podrán seguir usando si se conectan antes de una hora tras la incautación de un iPhone, por ejemplo usando el adaptador Lightning a USB tipo A+Lightning antes de que pase el tiempo. Por tanto, si mantienen vivo el puerto Lightning hasta conseguir una orden de registro, podrán seguir accediendo al iPhone. Eso hará que, por ejemplo, tengan que realizar las detenciones cuando se cercioren de que un sospechoso ha desbloqueado su iPhone.
Aun así, la caja usada para el desbloqueo aparentemente solo puede comprobar un pin cada 10 minutos tras la actualización a iOS 11.4, lo que lleva a que sea inusable si el usuario usa un pin de seis cifras; averiguar uno de cuatro cifras llevaría hasta dos meses.