Samsung presenta el Galaxy Note 9, mejorando el S Pen y añade una batería de 4000 mAh

Samsung no ha tenido un buen segundo trimestre en el terreno de los móviles porque, para sorpresa de pocos, el Galaxy S9 no se ha vendido tan bien como esperaban. Poca diferencia con el Galaxy S8 y un precio bastante elevado —849 euros por el más barato— hicieron que muchos miraran a modelos anteriores como el S7 y el S8 para renovar sus teléfonos.

Ahora la compañía ha presentado, como cada verano, su phablet insignia. Con el nuevo Galaxy Note 9 intenta convencer de que es posible seguir mejorando lo mostrado con el Galaxy S9, incluyendo un nuevo S-Pen y otros accesorios para orientar el teléfono al público más profesional, como autónomos y directivos. Un terminal más pensado para trabajar que como móvil generalista, diferenciándolo en principio claramente del Galaxy S9.

Características

El diseño del Galaxy Note 9 —o Note9, como lo escribe Samsung— no varía gran cosa respecto a teléfonos anteriores. Utiliza aluminio para la estructura y una trasera de cristal, aunque en sí el teléfono está hecho a prueba de agua y polvo con certificado IP68. La parte trasera permite la carga inalámbrica del dispositivo, y es también donde se sitúa un lector de huellas dactilares, si bien también permite el desbloqueo con el escáner de iris en la parte frontal.

Samsung ha recurrido a los mismos dos procesadores. El Snapdragon 845 que irá a parar a los teléfonos vendidos en EE. UU., China y Japón, y el Exynos 9810 que irá a parar a Europa y el resto de países en los que se ponga a la venta. El Exynos dispone de cuatro núcleos Exynos M3 a 2.6 GHz y cuatro Cortex-A55 a 1.9 GHz, con una GPU Mali-G72MP18, mientras que el Snapdragon 845 incluye cuatro Kryo 385 a 2.8 GHz y otros cuatro Kryo 385 a 1.8 GHz con una unidad gráfica Adreno 630.

El teléfono mide 161.9 mm × 76.4 mm × 8.8 mm y pesa 201 gramos, por lo que no varía mucho con respecto al Galaxy Note 8. La pantalla es de 6.4 pulgadas de tipo Super AMOLED, y tiene una resolución de 1440 × 2160 píxeles, lo que arroja una densidad de 516 píxeles por pulgada. Eso se notará seguramente en el consumo, si bien la batería pasa de los 3300 mAh a los 4000 mAh. Está protegida por Gorilla Glass 5, y es compatible con HDR10.

La batería se recarga por un puerto USB tipo C, compatible con vídeo DisplayPort 1.2, datos y carga rápida. El teléfono incluye 6 GB de RAM con 128 GB de almacenamiento, si bien habrá una versión con 8 GB de RAM y 512 GB de almacenamiento. También incluye un lector de tarjetas micro-SD de hasta 512 GB. Tiene wifi 802.11ac, Bluetooth 5.0 y NFC.

La cámara

Samsung ha optado por mejorar la cámara del Galaxy S9. En esta ocasión incluye un sensor principal de 12 megapíxeles con apertura variable de ƒ/1.5 y ƒ/2.4 de gran angular, mientras que el secundario tiene un sensor también de 12 Mpx con apertura ƒ/2.4 para teleobjetivo, con zum óptico de dos aumentos. La cámara frontal es una más discreta de 8 Mpx con apertura ƒ/1.7. Cuenta con estabilizador óptico de imagen, graba vídeo a 4K y 60 FPS, así como a super cámara lenta, lo que permite grabar a 720p y 960 FPS o 1080p y 480 FPS.

La aplicación de cámara cuenta con multitud de nuevos trucos, y en realidad es donde las empresas de móviles se tienen que diferenciar. En esta ocasión no hay puntuación de la web DXoMark por el momento, pero Samsung asegura que mejora sustancialmente la calidad de las escenas, tanto en condiciones de buena luz como de noche. No menciona inteligencia artificial sino que la denomina simplemente como cámara inteligente. Por ejemplo, puede detectar si alguien ha parpadeado al hacer una foto para sacar otra de manera automática en el que todo el mundo salga con los ojos abiertos, notificándose. Hay muchos pequeños cambios que afectan también al rango dinámico de las imágenes para obtener el resultado ideal.

S-Pen y DeX

Samsung ha renovado el S-Pen añadiendo nuevas funcionalidades y mejorando ciertos aspectos de él. Cuenta con un sensor de 4096 niveles de presión, y tiene un botón de acción que permite, por ejemplo, reproducir y pausar vídeos, pasar transparencias, y otras acciones en función de lo que los desarrolladores decidan hacer con él. Y todo ello a través de conectividad Bluetooth, que es la gracia de este nuevo S-Pen que se sigue guardando en el interior del teléfono. Tiene un tamaño de 106 mm con un peso de 3.1 gramos. Es también a prueba de agua con certificado IP68.

También saca de nuevo a colación la base DeX para usarlo como un PC al conectarle un teclado, ratón y monitor, con la versión de interfaz adaptada que incluye para su capa de personalización de Android 8.1. El móvil en sí, al estar conectado por el puerto USB tipo C, puede usarse como segunda pantalla. De hecho, para facilitar este uso hay un nuevo adaptador DeX más pequeño USB tipo C a HDMI para usar el teléfono también como panel táctil e interactuar con el sistema operativo.

Disponibilidad y precio

Samsung pone a la venta el Galaxy Note 9 el 24 de agosto por un precio en Europa de unos 999 euros por el modelo de 128 GB, y 1249 euros por el de 512 GB —según el IVA de cada país—. Llega en colores azul, rosa, negro y bronce. Tiene Android 8.1 preinstalado, si bien la actualización a Android 9 no debería de andar lejos.