Samsung ha empezado el año, y previo al CES, con la presentación del Galaxy Book Flex α (alfa). Se trata de un ultraportátil hecho en aluminio con un tamaño de 304.9 mm × 202 mm × 13.9 mm y un peso de 1.19 kg, que además es un convertible con pantalla de 33.7 cm (13.3 pulgadas) de tipo QLED (led de punto cuántico). Alcanza los 600 nits de brillo máximo con una gran calidad de color.
El procesador que incluye es un Core de 10.ª generación con su unidad gráfica integrada UHD 620. Se ofertará con 8 GB o 12 GB de memoria DDR4, así como 256 GB, 512 GB o 1 TB de almacenamiento SSD de tipo PCIe.
Incluye una batería de 54 Wh para hasta 17.5 horas de autonomía. Dispone de un puerto USB tipo C, dos USB 3.0, un HDMI y un lector de tarjetas micro-SD. Incluye altavoces estéreo de 2 W y un lector de huellas dactilares para usar el desbloqueo seguro Windows Hello.
El precio del equipo parte de los 829.99 dólares cuando se ponga a la venta en EE. UU. en esta primera mitad del año.