El sector de la refrigeración líquida integrada tiene multitud de modelos buenos en la actualidad, pero si quieres uno realmente bueno tienes que mirar a gastarte 130 euros o más. Por eso es tan raro ver un modelo realmente bueno como el Liquid Freezer II 240 de Arctic en la zona de los 80-90 euros, aunque sea prácticamente empezar el análisis por el final.

Esta refrigeración de doble ventilador de 240 mm puede convertirse en un buen referente para los que quieran evitar disipadores enormes de refrigeraciones por aire como el Ninja 5 de Scythe que empleo normalmente. No es especialmente ruidoso, pero no dispone de iluminación ARGB como otros modelos un poco más caros, aunque para el común de los compradores el precio será tentador.

Desembalado

Las refrigeraciones líquidas integradas, o también llamadas todo en uno por el inglés all-in-one (AIO), están muy de moda debido a que no precisan de una complicada instalación como las refrigeraciones líquidas personalizadas. Por eso su desembalado es simple y su posterior montaje suele ser sencillo. En el caso del Liquid Freezer II 240, llega en una caja ancha de buen tamaño.

El bloque de agua y bomba es la parte que se sitúa sobre el procesador, y llegan protegidos por un plástico, así como los tubos de conexión. El propio radiador también está protegido por una bolsa. Adicionalmente el bloque de agua está protegido en el interior de una pieza de cartón ya que es la parte más sensible de todo el sistema.

Los ventiladores vienen ya montados en el radiador y con sus cable de regulación de cuatro pines conectados al bloque de agua con un cable que va por el interior de la funda mallada de los tubos. El bloque de agua dispone de un conector de cuatro pines para regulación de su velocidad, el ventilador que incluye para el módulo de regulación de voltaje (VRM) y la de los ventiladores. La base del bloque de agua es de cobre, y llega protegida por un plástico con una clara advertencia de que se retire antes de usar el producto.

Todo el sistema está bien montado y protegido, incluidos los conectores de los tubos, y la estética general del producto es en color negro. Es una RL integrada de solo 80 euros pero de alto rendimiento, por lo que carece de iluminación con ledes RGB como otras refrigeraciones más caras.

Se proporciona la tornillería para su instalación en las placas base más comunes de AMD e Intel, estando separadas y en sus propias bolsas, y también se proporciona una pequeña cantidad (0.8 g) de pasta térmica MX-4 que es bastante buena y es la que he usado en el análisis.

Cabe destacar que no hay manual de instrucciones sino que se proporciona una tarjeta con un código QR que llevará al vídeo de instalación. Es una buena medida para ahorrar en papel en un manual que solo sirve una vez.

Características

Esta refrigeración integrada Liquid Freezer II 240 es de alto rendimiento, y además de serlo lo parece. El radiador de aluminio en color negro es grueso, con un tamaño de 120 mm × 277 mm × 38 mm, compactado al tamaño de los dos ventiladores de 120 mm incluidos, y con el espacio justo para los tubos que lo conectan con el bloque de agua.

Ese bloque tiene un diseño un poco más especial, y en lugar de salir los tubos por un lado salen de la parte superior. El bloque tiene un tamaño de 53 mm × 98 mm × 78 mm y funciona hasta a 2000 RPM, conectándose con un cable de cuatro pines que también alimenta los ventiladores. El peso total de radiador, bloque y tubos es 1191 g.

Los ventiladores son dos de 120 mm × 120 mm × 25 mm, y funcionan entre las 200 y 1800 RPM. Tienen una presión máxima de 2.2 mmH2O, flujo de aire de hasta 56.3 CFM y un ruido máximo de 26 dB. Se puede instalar en placas base con zócalos LGA1150, LGA1151, LGA1200, LGA1156, y AM4.

Liquid Freezer II 240 de Arctic
Bomba de agua53 mm × 98 mm × 78 mm
- Velocidadhasta 2000 RPM
Radiador120 mm × 277 mm × 38 mm
Ventiladores2 de 120 mm × 120 mm × 25 mm
- Velocidad200-1800 RPM ± 10%
Peso total1191 g
ZócalosLGA1150, LGA1151, LGA1200, LGA1156, AM4
PVPR79.99 euros

Montaje

Esta unidad es un poco más complicada de montar que otras refrigeraciones líquidas debido al sistema que ha usado Arctic. No todo podían ser buenas noticias. Es casi mejor idea montar primeramente el radiador antes de ponerse con la bomba de agua, y también es buena idea tener un destornillador magnetizado cerca o puede ser una tarea casi imposible montarlo.

En la parte trasera de la placa base hay que poner, en el caso del zócalo LGA 1200, una pegatina en cada uno de los orificios para ajustar la altura, y luego poner la placa de sujeción. Esa placa no se quedará muy fija y habrá que sujetarla de alguna forma, como celo o algo así teniendo cuidado, o se caerá porque los tubos apenas pasan a través de los agujeros.

Una vez puesta la placa trasera, en la parte delantera hay que poner otras pegatinas y unos tornillos espaciadores antes de poner el bloque de agua y afianzarlo con cuatro tornillos moleteados. Según cómo sea la placa base será más o menos difícil apretar los tornillos a mano, pero en el caso de los moleteados sí recomiendo usar un destornillador imantado o pueden terminar (varias veces) debajo del bloque de agua. Unido con la rigidez de los tubos, se hace un poco tedioso el montaje.

En mi caso, puesto que la caja no dispone de abertura superior para radiadores, e instalado el radiador en el frontal. En este caso hay que recordar que los tubos deben quedar en la parte inferior, y no hay problema con ello debido a la buena longitud de los tubos incluidos pro Arctic. Dentro del recubrimiento pasa el cable de alimentación de los ventiladores, por lo que la instalación queda muy limpia como podéis ver en las siguientes fotografías.

A excepción de que el montaje puede resultar un poco más complicado de lo que parece oportuno, tampoco es una labor titánica si miráis primero los vídeos de instalación que he puesto más arriba para los zócalos de Intel y de AMD. Pero ciertamente hay refrigeraciones líquidas mucho más fáciles de instalar que esta de Arctic.

Pruebas

Esta refrigeración y su sistema de bomba de agua y grueso radiador da bastantes buenos resultados. Puesto que el equipo de pruebas tiene actualmente un Core i9-10900K, generalmente reconocido como uno que genera altas temperaturas, este Liquid Freezer II 240 permite que funcione con unas temperaturas bastante normales y, más importante aún, con un ruido moderado.

Las siguientes temperaturas están medidas respecto a 26 ºC de temperatura ambiente. En reposo, la delta es de unos 36 ºC (Δ 10 ºC), mientras que en carga completa, por ejemplo en Furmark o en Cinebench R20, se alcanza una temperatura de unos 65 ºC (Δ 39 ºC). En juegos, la temperatura no suele pasar de 50 ºC (Δ 24 ºC).

En este funcionamiento el ruido se sitúa sobre los 32 dB, y si bien se nota que la bomba de agua y los ventiladores están funcionando si la casa está en silencio, no molestan aunque dependerá de dónde este colocado el PC en el escritorio. En cuanto al ventilador orientado a los VRM, no he podido hacer ninguna prueba concreta, aunque sí es capaz de bajar uno o dos grados su temperatura, pero no es nada especialmente beneficioso, aunque tampoco perjudica al equipo.

Los resultados anteriores es con el equipo con las frecuencias de referencia, y a continuación voy a explorar un poco los resultados con las frecuencias subidas a 4.9 GHz de turbo en todo momento, que no es un valor que sea especialmente exigente. En este caso las temperaturas en carga completa se sitúan sobre los 78 ºC (Δ 52 ºC) y el ruido se puede ir un poco más hacia los 36 dB, que ya es un nivel en que se notarán los ventiladores pero seguirá sin molestar. El ruido de los ventiladores es más bien grave, sin toques agudos que puedan molestar más, por lo que su calidad es buena.

Una gran refrigeración líquida

La refrigeración líquida integrada Liquid Freezer II 240 es un modelo como pocos en el mercado, y sobre todo con su PVPR de 79.99 euros. Los datos de las pruebas hablan por sí solos, y teniendo en cuenta que ese precio se consigue al no incluir iluminación led, bienvenido sea. Las temperaturas en reposo son buenas, en carga también, y hace un bajo ruido.

El montaje es el único punto malo de esta refrigeración, aunque tampoco es como para tirarse de los pelos. Si tienes mala suerte y te pasa como a mí que pierdes uno de los separadores dentro de la caja, igual te cuesta un poco encontrarlo, pero teniendo un poco más de cuidado todo el proceso de montaje debería ir bien.

La calidad del radiador y de los tubos es muy alta, con ese mallado que le sienta tan bien, y además los ventiladores no precisan de cables extra —salvo que se quiera, que también se puede— lo que permite una instalación más limpia. El mayor problema a la hora de comprar esta refrigeración en España es encontrarlo en las tiendas. O está alejado del PVPR o directamente no se encuentra en las principales tiendas, pero por el tiempo que nos quede dentro de la Unión Europea se puede recurrir a tiendas de Alemania donde lo venden por unos 82 euros, ya sea Amazon o Alternate, por poner solo un par de ejemplos.