Es un secreto a voces que la tónica general de TSMC, y por extensión otros productores de chips para terceros, es de subastar segmentos de capacidad de producción cuando la demanda es muy alta. Eso significa que TSMC obtiene más dinero por asignar producción a las compañías, y también significa que solo las que tienen más dinero pueden hacerse con esos segmentos de producción. Ahora la taiwanesa de los chips habría hecho otra ronda de subastas con alguna particularidad.
Esta nueva subasta le reportaría a la compañía unos ingresos adicionales del 15-20 % respecto al precio normal de producción de las obleas; y me parece poco. Lo particular de esta subasta es que son de asignación de capacidad que se ha quedado sin asignar o que se ha liberado por cancelaciones de pedidos. No está lloviendo por igual en todos los sectores de los semiconductores.
No se indica quiénes sería el comprador o compradores de esa capacidad de producción, pero se mira a los fabricantes de automóviles. Las cancelaciones de chips que hicieron en 2020 ha hecho que en este 2021 varias empresas tengan plantas cerradas a la espera de componentes. Dudo que esta producción adicional vaya a las grandes compañías como Apple o AMD porque negocian directamente con TSMC y tienen mucha capacidad reservada, así que miraría más bien a empresas pequeñas con necesidades puntuales.
Vía: TechSpot.