Hay cada vez más gente a la que le pica el gusanillo de emitir en directo a través de YouTube o Twitch, pero se precisan de mejores herramientas para hacerlo bien, sobre todo cuando se empieza a tener cierta repercusión. Razer sigue extendiendo su gama de productos para locutores, y en este análisis hablaré de un micrófono y una pantalla de iluminación al estilo de la compañía. Son los Seiren BT y Key Light Chroma.

Para hacer funcionar estos dispositivos, que ambos incluyen Bluetooth para manejarlos desde un móvil, se precisará de una apli específica, Razer Streaming, disponible para iOS y Android. También se podrán controlar a través de Synapse 3.0.

Videoanálisis

Seiren BT

El primer producto es un micrófono Bluetooth para facilitar la movilidad y la grabación en todo tipo de entornos sin que entorpezcan los cables. El Seiren BT llega en la habitual caja verde y negra de la compañía, y en su interior se puede ver la habitual nota de agradecimiento por la compra, una manual de usuario y una típica pegatina.

El Seiren BT está en el centro de la caja, flanqueado por dos cajas más pequeñas. En una hay un cable corto USB tipo A a USB tipo C forrado de tela trenzada y totalmente negra. En la otra hay dos filtros antiviento, uno de espuma y otro de pelo. La de espuma es la que generalmente se va a usar en interiores y la de pelo en exteriores.

La de pelo, según lo que he podido comprobar, funciona bien para viento suave aunque como suele ser habitual no va a servir de mucho con viento moderado. Aun así, la de pelo suele ser un buen añadido, y bastante buscado por los profesionales por el buen resultado que da. En interior, o en exterior si no hay viento, muchas veces dará más o menos igual ponerle al micrófono un filtro o no.

El Seiren BT es un pequeño micrófono que pesa 14.5 g hecho en color negro, de forma alargada y con un clip en una de las caras para sujetarlo a la ropa. En la parte superior hay una toma de 3.5 mm para monitorizar el volumen —o reproducir música desde el teléfono al auricular que se conecte— y el micrófono que graba a 48 kHz, mientras que en la parte inferior se sitúa un conector USB tipo C para la recarga. En un lateral hay un botón de encendido que si se deja apretado se iniciará el proceso de emparejamiento. Su autonomía se sitúa en torno a las 6 horas gracias a su batería de 140 mAh y la conexión Bluetooth 5.0 con el habitual alcance de 10 m.

El micrófono es omnidireccional, y tiene una calidad bastante buena para el tamaño que tiene y siendo Bluetooth. En la aplicación de configuración se pueden ajustar algunos parámetros adicionales, que serán útiles en entornos con ruido. Es un filtro por inteligencia artificial y ajustable que no da mal resultado. Permitirá reducir el ruido por viento, coches u otras personas cercanas por el tema omnidireccional del micrófono. Tendrá un efecto en la autonomía reduciéndola a 4 h.

También se puede modificar la latencia para la grabación lo cual la bajará a 20 ms, siendo recomendable activarla para directos y tampoco molestará en grabación de vídeo para posprocesado. Desde la propia apli de Razer se puede silenciar el micrófono y consultar su nivel de batería. Para grabar, funciona igual de bien con cualquier programa de grabación, ya sea de Razer o cualquier otra ya que al fin y al cabo es un micrófono como cualquier otro. Se puede usar con Twitch, YouTube, Facebook…

Buen micrófono y útil

El tema de los micrófonos para grabación de vídeos es complicado. Suelen ser más bien necesarios para los locutores que salen a la calle porque los micrófonos de las cámaras no siempre tienen la calidad suficiente, o el locutor se sitúa muy lejos de la cámara. De una u otra forma, quien graba vídeos en la calle necesita un micrófono, generalmente conectado a un receptor mediante un cable. Los hay baratos y de calidad decente, por lo que un posible problema sería los 110 euros que cuesta el Seiren BT.

Mi impresión es que probablemente a su PVR pueda ser una interesante alternativa. En estos escenarios lo que prima es la calidad de sonido y la fiabilidad, y una conexión Bluetooth puede no ser fiable en entorno urbano. En la calle puede haber mil interferencias de gente que pase cerca, desconexiones puntuales por diversos motivo físicos o lógicos del móvil, y otras. Para casa podría ser más fiable, pero la utilidad de un micrófono Bluetooth es muy residual y para ciertos escenarios concretos. Si estás delante de la pantalla, un micrófono normal será mejor alternativa. Por 110 euros se pueden comprar algunos bastante buenos, y si te vas a los 150 euros son de calidad de estudio.

El tema de los micrófonos personales para grabar en exteriores es muy variado y lo mismo hay modelos de 25 euros que de 500 euros. Por la calidad que tiene la grabación del Seiren BT me resulta una opción interesante aunque el precio podría ser un poco mejor. Pero no es una locura, e incluso por sus características específicas tampoco tiene muchos competidores en el mercado, y ninguno que sea claramente mejor en precio-prestaciones. El Seiren BT es un modelo de micrófono Bluetooth que si te estás iniciando en este mundillo y haces muchos directos puede resultarte bastante interesante y cómodo.

Key Light Chroma

Razer quiere proporcionar un completo ecosistema de dispositivos para los locutores y eso implica también aportar los accesorios para que se iluminen bien. Una buena iluminación es la diferencia entre que se le ve con mala cara o buena cara. El Key Light Chroma es lo que ofrece para la iluminación de «estudio» casero, con el toque habitual de la compañía.

Nada más abrir la caja en la que llega se puede ver la pantalla led de iluminación, la cual tiene un peso de en torno a los 1.6 kg. Se nota pesado y eso dará algunos problemas a la hora de montarlo. En otra caja se incluye el tronco del soporte que está hecho de aluminio, el torno de sujeción a una mesa, y la pieza de giro y sujeción de la pantalla. Eso son otros 760 g de peso.

El tronco del soporte mide 55 cm pero se puede extender en dos secciones para alcanzar una altura máxima de 135 cm. Cada sección se fija a rosca y no me ha dado problemas aunque para hacer las pruebas no he necesitado extenderlo. He fijado la pantalla a la mesa en la que habitualmente hago las fotos, vídeos y pruebo los productos de los análisis.

Se incluye un cargador para la pantalla con un cable y varias cabezas para enchufes de distintos países. También se incluye un extensor de cable de alimentación, que en este caso sí lo he necesitado y por tanto es un buen añadido. Para que no queden los cables volando se incluyen dos clips para ajustar el cable de alimentación al tronco del soporte.

En cuanto a la pantalla, mide 360 mm × 260 mm. Alcanza los 2800 lúmenes y además de aportar una luz blanca se puede configurar desde la aplicación de móvil o Synapse 3.0 en otros colores. Por ejemplo, la principal utilidad es que la luz permita notar bien el tono de piel. Se puede regular entre tonalidades de temperatura de color entre los 3000 ºK a los 7000 ºK. No faltan las opciones de efectos como rotación de espectro para aclimatar un poco las sesiones de juego mientras se retransmite. La iluminación la aporta 168 ledes con un consumo total de 45 W.

El interruptor de encendido se encuentra en lo que sería la parte inferior de la pantalla, aunque dispone de agujeros a rosca en los cuatro laterales. También incluye un botón en el centro de la parte posterior para hacer el emparejamiento Bluetooth, aunque en la apli Razer Streaming pedirá que se seleccione una red wifi para la pantalla lo cual simplificará mucho la gestión. Eso sí, quizás la mayor pega sea que solo es wifi 802.11 b/g/n en la banda de los 2.4 GHz, una banda que ya no uso y por tanto la he tenido que activar a posta en el rúter.

Buen foco con buenas opciones

Una pantalla de iluminación de este tipo, un foco RGB, suele ser necesario en algún punto si alguien empieza a hacerse un hueco en el difícil mundo de YouTube y los directos. Una buena iluminación lo es todo en la grabación de vídeo. Pero aquí hay que tener en cuenta que estoy hablando del Key Light Chrome que cuesta 300 euros. Debido a su diseño, si se quiere una disposición más profesional se van a necesitar dos para minimizar las sombras en la cara por lo que eso llevará el coste a los 600 euros.

Por prestaciones este foco RGB está muy bien. Tiene la capacidad de alcanzar un brillo bastante alto y la modificación al vuelo del color de la illuminación blanca para hacerla más cálida o fría resulta muy útil. Las opciones de soporte, extensión y uso por Bluetooth/wifi son buenas y lo diferencia de otros productos similares. Teniendo en cuenta, claro está, que es un producto orientado a jugones. Para los locutores de contenido más generalistas tienen muchas otras opciones más adecuadas, aunque no necesariamente más baratas.

Productos similares, sin la iluminación RGB y el control desde el móvil, pueden costar sobre los 200 euros, aunque Razer pone el PVPR a su producto en un momento de inflación y fortaleza del dólar. Todos los productos presentados últimamente tienen un PVPR mayor. Aun así, hay un cierto sobrecoste frente a otros productos similares. De hecho, el diseño es prácticamente igual a otras soluciones de compañías del sector jugón como Elgato. La diferencia es ese RGB que sin duda terminarán copiando y un ecosistema muy sólido de productos, así como el fácil control con el móvil o a través de Synapse 3.0. Eso son dos puntos fuertes de diferenciación.