La coyuntura económica está haciendo imposible hacer predicciones de consumo acertadas por lo que muchas firmas están revisando sus datos semana a semana. En el caso de TrendForce, ya ha revisado varias veces la caída de precio de la memoria NAND pero la última revisión hunde aún más su precio durante este trimestre. Pasa del anterior 15-20 % hasta un 30-35 %.
El precio de la NAND afecta al precio de las SSD uno o dos trimestres después, por lo que si sigue la tendencia durante el cuarto trimestre de 2022, durante el primer trimestre de 2023 debería haber caídas más sustanciales del precio de las unidades de estado sólido (SSD). La entrada en producción de NAND 3D de 128 o más capas es la responsable del aumento de oferta de chips, que es en algo en lo que han competido sin descanso los principales productores de NAND pensando que la demanda se iba a mantener como la de los dos años anteriores de coyuntura sanitaria.
Es de imaginar que los fabricantes de NAND empezarán a reorganizar la producción y probablemente recorten sus planes de expansión de fábricas para intentar contener la caída. El bajón de precio se debe sobre todo a la falta de demanda en el sector consumo de todos los dispositivos que llevan almacenamiento NAND, desde las SSD hasta móviles y tabletas, aunque en estos últimos solo son una pequeña parte del coste y no afectará tanto a su precio.
Vía: TechSpot.