Los intrauriculares Bluetooth son muy útiles como compañeros de un móvil a la hora de hacer deporte o ir en transporte público, pero en este último caso muchos prefieren aislarse más del entorno. Ahí es donde entran pinganillos como los Elite 5 de Jabra, que es uno de los últimos modelos más avanzados presentados. Tienen la ventaja de no ser excesivamente caros, con un PVPR de 149 euros, teniendo una buena calidad general.
Videoanálisis
Desembalado
El modelo recibido para analizar de los Elite 5 es el de color beis oro, aunque también está disponible en negro titanio. Se presenta en una caja blanca de pequeño tamaño, con una cobertura en la que se hace hincapié en la cancelación activa de ruido, viéndose claramente que viene con varias puntas de goma para ajustarlos mejor. Esas puntas son importantes porque si no se ajustan los pinganillos a la perfección la cancelación de ruido no se notará.
Quitada la cobertura y abierta la caja, hay un cartón en el que se indica que se activan al sacarlos del estuche con el que vienen y que se apagan al ponerlos de nuevo en él. También apunta a que se descargue la apli Sound+ de Google Play o de la App Store. Quitado el cartón, se puede ver el estuche de los auriculares, las puntas de goma y un pequeño cable USB tipo A a USB tipo C.
El estuche tiene un diseño bonito, con el nombre de la compañía en el frontal así como un led de notificación, generalmente para indicar el nivel de carga, y una toma USB tipo C en la parte trasera. Además, se puede recargar en cualquier base Qi, lo cual es siempre un plus. Lo he probado en una base que suelo usar de vez en cuando, y funciona sin problemas. La recarga será algo más lenta, pero es más útil que estar poniendo y quitando el cable USB tipo C.
El diseño de estos pinganillos es el habitual en estos casos, con una trompa corta con una punta de goma que va insertada en el canal auditivo, y una cabeza grande que permite quedarse más fijo en el oído. En los Elite 5 la superficie del pinganillo es de un color marrón claro, que además hace de botón. Prefiero este tipo de intrauriculares a los que tienen una superficie táctil ya que al recolocarlos siempre consigo activar alguna acción que no quiero.
En este color beis son bastante discretos y se ajustan bien al oído. Las puntas adicionales incluidas son un par de tamaño pequeño y otro par grande, estando puestas por defecto las de tamaño medio. Me han servido bien para ajustarlos en el oído y que su cancelación activa de ruido funcionara correctamente. En su superficie se puede ver también una rejilla para el micrófono, uno en cada uno, y para alivio de presión.
Características
Los Elite 5 son unos intrauriculares Bluetooth avanzados, aunque no son los mejores que tiene Jabra en su catálogo. Están en un término medio, ofreciendo una calidad de sonido bastante buena aunque no excepcional, y una cancelación activa buena aunque no excepcional. Para el PVPR de 149 euros que tienen, con un PVP que puede ser inferior, sobre los 125 euros en el momento de escribir este artículo, tienen muy buenas características técnicas.
Más allá del aspecto y de la comodidad de las que ya he hablado, cada pinganillo tiene un transductor de 6 mm, con una respuesta en frecuencia entre los 20 y 20 000 Hz. Implementan los códecs AAC, SBC y el aptX de Qualcomm, por lo que sirve para cualquier dispositivo Bluetooth actual, aunque el aptX no esté disponible en los iPhone, por ejemplo.
Elite 5 de Jabra | |
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Tipo | intrauriculares Bluetooth (pinganillos) |
Conexión | Bluetooth 5.2 |
Perfile Bluetooth | A2DP, AVRCP, HFP, HSP |
Resistencia al agua y polvo | IP55 |
Respuesta en frecuencia | 20 a 20 000 Hz |
Transductores | 6 mm |
Micrófono | Sí, omnidireccional |
Micrófono: respuesta en frecuencia | 100 a 8000 Hz |
Plataformas | Cualquiera con Bluetooth |
Autonomía | 9 h sin ANC, 7 h con ANC |
Autonomía estuche | 28 h (tres o cuatro recargas) |
Códecs de audio | AAC, aptX, SBC |
Otros | estuche con recarga inalámbrica Qi |
PVPR | 149 euros |
Se pierden un poco los graves al reproducir música, pero es habitual en este tipo de auriculares. No esperaba que pudiera reproducir adecuadamente los graves más profundos de Blood || Water de Grandson, que la uso como referencia para esto. Además, los graves están un poco deslucidos por falta de potencia, pero en general las canciones con mucha batería suenan bien. Las frecuencias medias están bien representadas, y los agudos tienden a apagarse en las frecuencias más altas. Nada que no sea habitual en este tipo de auriculares, pero en conjunto cualquier tipo de música suena bien, desde rock hasta jazz pasando por la de baile o pop.
Estos auriculares tienen un micrófono para usar el Asistente de Google, Alexa o Siri —el que se tenga o se prefiera usar en el dispositivo emparejado—, aunque cuentan con dos adicionales que se activarán cuando se esté hablando en una llamada y se detecte viento. El micrófono tiene una respuesta en frecuencia entre 100 y 8000 Hz, y en general hace un buen apaño, aunque no hay milagros con estos micrófonos omnidireccionales en los intraauriculares Bluetooth. La voz se escucha algo lejana, y es recomendable hablar alto para que la capte bien. No introduce casi ruido, aunque algunas veces la voz suena algo enlatada pero generalmente suena más natural. Hace un buen trabajo, aunque no sea el mejor micrófono que he probado en unos pinganillos. Cumplen a la perfección para responder llamadas o grabar notas de voz.
Cada pinganillo pesa en torno a los 5 g, y están hechos a prueba de agua y polvo con certificado IP55. Jabra afirma que su autonomía se sitúa en las siete horas con ANC y nueve horas sin ANC. Lo cumplen bastante bien, incluso me han durado algo más aunque suelo escuchar la música más bien baja. Tardan en torno a las dos horas en recargarse totalmente. El estuche aporta tres o cuatro recargas adicionales, hasta 28 h más de uso. Cuenta con recarga por Qi, que puede ser más lenta que conectarle un cable USB tipo C.
En cuanto al Bluetooth, es de tipo 5.2, pudiendo estar emparejado con hasta seis dispositivos a la vez. Simultáneamente puede estar conectado a dos dispositivos, por ejemplo un PC en el que se trabaje y un móvil del que contestar sus llamadas. Es compatible con los controles de música por Bluetooth, pudiéndose configurar en la aplicación Sound+, aunque hacerlo todo con dos botones, uno en cada pinganillo, no da mucha variedad de acciones. Sobre todo si el botón del izquierdo es para el ANC.
Programa de configuración
Jabra mantiene en la App Store y Google Play la aplicación Sound+. Es una pena que no la haya llevado a Windows y macOS, aunque normalmente este tipo de auriculares se van a usar principalmente con un móvil. Tras arrancar la aplicación se ofrecen una serie de pasos para personalizar lo máximo posible los Elite 5, lo cual incluye algunas cosas el nivel de supresión de ruido que se desea obtener.
Se puede configurar el botón de control de cada pinganillo. Por ejemplo, eso incluye añadir al de gestión del ANC en el pinganillo izquierdo la opción de apagarla y no solo cambiar entre activo y modo transparente. En la pantalla de inicio de la aplicación también se verán varias opciones de ecualización predefinidas aunque también se puede personalizar, por lo que es otro aspecto bien cubierto.
Desde esta aplicación también se gestiona la actualización del firmware de los auriculares, se muestra el nivel de carga de cada pinganillo y el estuche de carga, la pausa automática de la música al quitarse un pinganillo, responder automáticamente o no a las llamadas, el nivel de volumen de tu voz en llamadas, etc. Es una aplicación bastante completa y que por lo general funciona bien. No echo nada en falta.
Cancelación de ruido en pequeño formato
Los intrauriculares no son el tipo de auriculares que suelo utilizar porque cualquier modelo me molesta al rato de usarlo, lo cual es algo muy común. Suelo llevar unos en la mochila por la comodidad del tamaño, pero solo los uso de Pascuas a Ramos. Los modelos con mástil los suelo tolerar bastante más, y modelos como los Elite 5, sin mástil, bastante menos. Por eso lo primero que puedo decir de los Elite 5 de Jabra es que he conseguido estar un par de horas seguidas con ellos puestos antes de que me empezaran a molestar. Recolocarlos un poco me ayudó a estar con ellos puestos un poco más, pero en torno a las tres horas tuve que quitármelos un rato para luego seguir usándolos.
El ajuste en el oído es fundamental y es un proceso muy similar a ponerse tapones: al principio no aciertas a ponértelos bien. De hecho, puedes pasarte diez minutos intentando ponerte los tapones, y por mucho que los espachurres y hagas todo tipo de movimientos no lo consigues. Con los intrauriculares con cancelación de ruido pasa lo mismo: hay que dedicarle tiempo a ponerlos bien la primera vez, o como unos tapones mal puestos no te servirán de nada. La inclusión de tres juegos de puntas de silicona es perfecta para conseguir taponar los oídos y que la ANC funcione como debe.
Estos intrauriculares son los más cómodos que he usado en muchísimo tiempo, y al menos en mi caso se han ajustado bastante bien a mis orejas. Si te los pones bien, notas una cierta sensación de vacío y que te bloquean bastante el ruido externo, como cuando te pones tapones. Si no te los pones bien, o uno sí y otro no, bueno, no notas diferencia en el ruido. En ambos casos la calidad del sonido no se ve afectada, aunque obviamente la gracia de estos pinganillos es precisamente la cancelación activa de ruido.
Cuando no se necesite, el modo transparente es francamente bueno, de los mejores que he probado, potenciando ligeramente el sonido externo. Junto con una cancelación de ruido configurable en Sound+, que me parece buena ANC aunque no esté entre las mejores del mercado, es un apartado que está bien cubierto. Pero insisto: es complicado, pero no demasiado, ponérselos bien la primera vez para que realmente la ANC surta pleno efecto. Hay que probar las distintas puntas de silicona para elegir la que mejor bloquee el sonido externo. El AND amortigua más los agudos que los graves, lo cual es habitual, con un resultado que se queda a cierta distancia de los QuietComfort 35 II que uso habitualmente. No está mal.
En cuanto al sonido, es bastante bueno dentro de las limitaciones de tener unos transductores de 6 mm. Con eso no se pueden hacer milagros, y menos en un producto que cuesta 150 euros y que además tiene ANC. El sonido en general suena bastante bien, con buenas frecuencias medias y altas, aunque claramente no es un sonido neutro. Los graves más profundos se pierden un poco aunque no demasiado aunque no del todo notándose solo un poquito, lo cual afectará más a unos tipos de música que a otros.
La ecualización no hace milagros en este caso. Si no puede reproducir graves profundos, con la ecualización tampoco. Pero para ser unos intrauriculares Bluetooth, creo que tienen un sonido bastante bueno en los estilos que suelo escuchar y con los que los he probado: rock —desde metal hasta rock duro o incluso glam (Kiss, que estaba dándole un repaso a su discografía)—, pop, baile.
Tienen una autonomía más que decente. Suelo escuchar la música en torno a un 20-25 % del nivel máximo en Windows o macOS, por la noche incluso menos, sobre el 10-15 % por aquello de que no hay ruidos de ningún tipo y el sonido empieza a molestar si lo pones muy alto por el cansancio del día. En esa condición me han durado con el ANC activo en torno a las nueve horas de uso a lo largo del día y la noche. Eso es lo que Jabra menciona como duración habitual sin ANC, pero se suele calcular con un volumen bastante más alto que al que suelo poner los auriculares. Por esta parte no he tenido problemas. Tampoco la del estuche. Al cuarto día de usarlos los puse a recargar, justo cuando el led se puso rojo.
Sobre el micrófono, bueno, está bien pero en este terreno no se pueden hacer milagros. No he encontrado ningún intrauricular Bluetooth que tenga un micrófono excepcional. Pero tampoco va a haberlo por la simple razón de que son micrófonos omnidireccionales alejados de la fuente de la voz. Normalmente captan la voz baja y como si se estuviera hablando desde lejos, aunque la voz suele oírse bien, perfectamente reconocible. Muchos introducen bastante ruido de fondo, pero no es el caso. En los Elite 5 el micrófono graba normal, tirando a bien, pero como siempre la voz se nota un poco apagada. No he podido probarlos con viento porque, bueno, para eso se necesita un día de viento y no lo ha habido. Para conversaciones por la calle sirven perfectamente, siempre que no sea un entorno especialmente ruidoso.
Poco más me queda por comentar de los Elite 5. Me han gustado bastante más que los que he probado hasta ahora. Puedo destacar el audio como un punto fuerte, y que me han resultado micho más cómodos que otros de su tipo, lo cual no es algo menor. La carga Qi del estuche es siempre algo positivo, y la autonomía me ha parecido estupenda para mi uso. Son bonitos, y en este color beis oro quedan discretos. Son un producto que podría mejorar en algunos aspectos, como la cancelación activa de ruido, pero tampoco es mala, y mejorarla llevaría a conformar un producto más caro. En general son un producto totalmente recomendable.