Aunque Turtle Beach es una empresa más centrada en los productos de audio para jugones también cuenta con otros productos como mandos para consolas como el React-R. Suelen ser modelos que ofrecen un conjunto de características algo mayor a menos precio que los mandos oficiales, o que ofrecen mucha más personalización y botones por un precio mayor. Este React-R se incluye en el primer grupo, siendo un interesante mando para Xbox.

Desembalado y características

El mando React-R llega en la habitual caja blanca de los productos de la compañía, con los toques de color verde justos para saber que es un producto de Xbox, aunque eso lo deja clara la pegatina oficial de que es un producto «diseñado para Xbox». También deja claro que es un producto cableado, lo cual le restará interés para muchos. Por la parte de atrás destaca los controles de audio integrados en la cruceta, las levas de la parte inferior o la inserción del Superhuman Hearing, el audio especial para potenciar los graves y detectar más fácilmente pasos cercanos, entre otros sonidos.

Nada más abrir la caja se puede ver el cable de conexión de dos metros y medio, teniendo un USB tipo C que va al mando y un USB tipo A a la Xbox. Se incluye una guía de inicio rápido detallando para qué son los botones de su superficie, y una hoja sobre cómo contactar con la compañía en caso de que se necesite asistencia.

El mando en sí llega envuelto en una bolsa de plástico compostable, lo cual es algo a tener en cuenta a la hora de desecharla. El mando recibido para el análisis es el de color blanco y violeta, aunque hay también una versión en color negro. Este tipo de combinaciones me dan más la sensación de ser de juguete.

Se nota muy ligero en la mano (271 g), más que el mando de Xbox, debido a que no usa ni pila ni baterías. Es la ventaja de los mandos cableados. Tiene un aspecto similar al de los mandos oficiales, con una superficie que es mayormente de plástico pulido, si bien las abrazaderas tiene una textura rugosa para favorecer el agarre. Es bastante agradable.

La disposición de los botones y palancas de la parte frontal es la clásica, con una botonera para los de acción, una cruceta de 360º, los dos joysticks, botón Xbox, y los botones de vista, compartir y menú. Turtle Beach le añade a esta parte varios botones. El primero es el de oído sobrehumano para amplificar ciertos graves, otro es para darle un uso alternativa a la cruceta —modificar volumen de auriculares y para cambiar el mezclador de chat—, y otro para silenciar el micrófono de los auriculares que se le conecten al mando en el puerto de 3.5 pulgadas en la parte inferior.

La sensación de manejo de las palancas es similar al del mando de Xbox, con una rugosidad en torno a la parte superior para evitar que se escurran mientras se usan. Los de la botonera me dan la sensación de ir un poco más suaves que los del mando de Microsoft, mientras que la cruceta va más dura y de hecho tiene más distancia de actuación.

En la parte superior del mando están los habituales dos botones superiores y dos gatillos. También cuentan con cierta rugosidad en lugar de ser lisos, lo cual me resulta curioso pero tienen buena sensación al tacto. En esa parte superior también está la toma USB tipo C. En la parte trasera hay dos botones adicionales a modo de levas, que serán interesantes para configurarlos en juegos. Están bien posicionados y al menos con el tamaño de mi mano quedan perfectamente para su uso con los dedos corazón.

Se pueden configurar pulsando dos veces en el botón alternativo de la cruceta, se pulsa luego el botón posterior que se quiera, y por último un botón del mando. La asignación se puede deshacer cuando se quiera. El React-R también dispone de vibración, con una sensación un poco mejor que la del mando Xbox. Me gusta más, pero generalmente la tengo desactivada porque me suele poner un poco nervioso que el mando esté vibrando. Hay una aplicación de Turtle Beach en la tienda de Xbox y en la de Microsoft en Windows, pero no tienen opción para este mando.

Opinión

La primera impresión que me dio el React-R, nada más sacarlo de la bolsa fue de ser un mando de juguete, aunque más motivada por los colores que tiene y el tipo de plástico. De hecho está claro que está orientado a la parte baja del sector, con un PVPR de 45 euros, pero su PVP bajará. El mando de Xbox tiene un PVPR de 70 euros, siendo inalámbrico, pero se puede encontrar más barato porque lleva bastante en el mercado. Hay mucha competencia en torno al PVP de 45 euros, muchos inalámbricos mediante adaptador USB, pero no tienen las características adicionales del React-R, que es donde marca la diferencia.

El modelo en color negro, que también lo he podido tener en las manos, da una primera impresión mejor. A pesar de ello, y a medida que se exploran las características del mando y se juega con él, la impresión va mejorando cada vez más. Suelo jugar con el mando Xbox Elite, por lo que no tiene nada que ver con él, pero es un mando que me ha gustado para lo que cuesta.

El oído sobrehumano es efectivo cuando se juega con auriculares. Siempre me ha parecido una buena tecnología para amplificar pasos y ciertos graves que podrían pasar desapercibidos, aunque no siempre es de utilidad, o no en todos los juegos. Las levas inferiores son siempre útiles, aunque se agradecería un poco más de posibilidades de configuración y que se pudiera configurar con la aplicación de Turtle Beach para Xbox. La función alternativa de la cruceta es muy útil y en ese terreno gana a otros mandos.

Como he dicho, el fallo del mando quizás sea el PVPR de 45 euros, aunque teniendo en cuenta la coyuntura económica todos los productos que se están presentando actualmente tienen ya una subida de precio, más en la eurozona que en EE. UU. por la debilidad del euro. Pero valorar su precio nada más salir con otros mandos que pueden llevar años en el mercado no lleva a nada. Esos otros mandos suelen ser básicos, sin características extras, por lo que el React-R es superior en ese terreno en este punto de precio. Pero necesita bajar un poco el precio.

Por lo demás, me ha gustado mucho la sensación de agarre con la rugosidad de las abrazaderas, así como la de las palancas y los botones de la parte superior. Los botones de acción me ha gustado que sean un poco más suaves, y también que la cruceta tenga un poco más de recorrido. En general es un mando bastante bueno para aquellos que prefieran un modelo cableado no demasiado caro.