Las unidades de estado sólido (SSD) de tipo PCIe 5.0 van a ser realmente rápidas pero eso implica un mayor consumo y por tanto más calor a disipar por parte de la refrigeración que lleven. Los usuarios normales no tendrán problema con disipadores normales porque no es habitual que generen cargas sostenidas durante minutos u horas, pero los profesionales sí. Por eso las soluciones como la Blazing M.2 Gen 5 Fan-Heatsink de ASRock van a ser lo común para estas SSD.
Es un disipador de aluminio bastante alto, en torno a los 4 cm, que cubre prácticamente toad la unidad M.2, con un ventilador de 3 cm de diámetro y 1 cm de grosor que mueve un caudal de 8.4 m3/h (4.92 CFM). Habrá varios tipos, además de versiones en color aluminio y negro.
La compañía ha dado una serie de placas base compatibles con su instalación —dieciséis X670, B650 y Z790—, porque esa es otra. Con el tamaño que tiene, habrá que tener cuidado. Como se puede ver, lleva tornillos para sustituir los dispersores de aluminio incluidos con sus placas base, por lo que su compatibilidad con placas base de otras compañías puede ser bastante limintada.
Vía: TechPowerUp.