TSMC no ha tenido claro desde un primer momento el inicio de las operaciones en EUA, pero la presión política y los supuestos incentivos económicos que iba a tener hicieron que tomara la decisión de producir en el país. Pero la aprobación de las condiciones de la Ley CHIPS han enfadado a la compañía porque son contraproducentes para sus intereses. Quizás por ello los rumores de que va a cobrar un 30 % más por lo producido en EUA son factibles.
La no siempre fiable Digitimes asegura que la horquilla sería del 20-30 % para los procesos de 4 nm y 5 nm, mientras que los de 12 nm en adelante tendrían un coste de un 10 % a un 15 % superiores. Ese aumento de coste tendrá que ser repercutido en los clientes de los que encarguen los chips, como Apple o NVIDIA, por lo que podrían usar las plantas de TSMC en Arizona para chips de computación de alto rendimiento u otros tipos con altos márgenes de beneficios.
Es un aumento notable, porque se comería la ventaja de tener menores costes de transporte. Pero esa capacidad extra la van a necesitar, o al menos debería ser así una vez se normalice la demanda del consumo en la segunda mitad del año. Si es que no ocurre alguna otra cosa, como que nos caiga un meteorito o nos invadan lo extraterrestres, porque todas las previsiones para estos primeros años de la década se han roto.
Vía: Tom's Hardware.