Corsair ha presentado un nuevo modelo de ratón inalámbrico ultraligero, el M75 Air Wireless, con el que apunta a hacerse con la corona de un tipo de producto cada vez más buscado. Sobre todo porque tiene Bluetooth y receptor USB para esa conectividad, junto con un bajísimo peso de 60 g. Corsair está refinando cada vez más el diseño de estos ratones, por lo que el resultado es más que interesante. Su PVPR de 150 euros es alto, pero no resulta excesivamente alto para lo que aporta.

Videoanálisis

Desembalado

El M75 Air Wireless llega en la habitual caja negra y amarilla de Corsair, con un tamaño muy ajustado al tamaño del ratón y los pocos extras que incluye. En la portada se destaca que es un ultraligero y su diseño simétrico. Por la parte de atrás, en letra basatante pequeña, se destacan más aspectos, incluido el uso por Bluetooth o Slipstream, el receptor USB de la compañía.

Al abrir la caja se puede ver el ratón envuelto en papel para protegerlo, dejando atrás finalmente la era de usar bolsas de plástico para ello, junto con el receptor USB Slipstream. Al retirar la bandeja se deja acceso al cable USB tipo A a USB tipo C de 1.8 m de longitud forrado de tela trenzada para su uso cableado y recargarlo. También se ven los manuales de conformación y garantía. Para el manual de uso se remite a internet mediante un QR.

El M75 Air Wireless es un ratón bonito, que estará disponibles en colores blanco, negro y gris oscuro. Tiene un diseño simétrico con solo dos botones adicionales en el lateral izquierdo. Su forma permite un buen agarre ya se tenga uno garra, yemas o palma. Uso generalmente este último y no he tenido problema en adaptarme a su diseño en solo unos minutos de empezar a utilizarlo. Siempre hay que modificar ligeramente el agarre que se tenga entre ratones, pero este se nota un buen diseño ergonómico. Quizás pueda ser un ratón un poco grande si se tiene la mano muy pequeña, pero en mi caso me ha resultado muy cómodo.

Aunque el diseño es mayormente en mate, tiene elementos en brillo como los botones laterales, el logo del reposapalma y un par de franajas que recorren la parte superior. En el lateral izquierdo también tiene el nombre de la serie, aunque puede pasar desapercibido. En la parte superior hay un led que indica el estado de la conexión, azul para Bluetooth y verde para el receptor USB, aunque también dará notificaciones de carga o intermitente si está listo para emparejar, por ejemplo.

La ruedecilla tiene un color amarillo en el centro, siendo de desplazamiento suave aunque notándose perfectamente los pasos al desplazarla. Los botones principales dan una gran sensación de clic, aunque su ruido es algo más alto de lo habitual con un sonido más grave. Se pueden pulsar sin problemas desde cualquier parte de su superficie que se puede ver que está perfectamente delimitada, lo cual favorecerá por ejemplo a los que tengan las manos más pequeñas o los que tenga un agarre tipo garra.

En el frontal está el habitual puerto USB tipo C para recarga, como tiene que llevar cualquier producto que se vaya a vender en la Unión Europea dentro de poco. Hay mucho espacio a su alrededor, por lo que no habrá problema a la hora de usar ciertos cables USB tipo C cuyo cabezal es lligeramente más grueso o más ancho.

El lateral derecho está limpio, aunque a algunos les habría gustado que hubiera un par de botones adicionales que siempre son de utilidad, aunque eso habría añadido gramos a este M75 Air Wireless, y no es la orientación que tiene. Por eso es sobre todo un ratón para juegos de acción rápida. Los botones del lateral derecho dan muy buena sensación al tacto, estando también en una posición perfecta para mi agarre, y tienen un clic con un sonido muy agradable.

Si se mira la parte inferior del ratón se puede ver el sensor, del cual hablaré en un momento, y un botón triangular con el que se seleccionará el tipo de conexión. También sirve para encender y apagar el ratón si se deja unos segundos pulsado. Dándole un toque se cambia entre la conexión por Bluetooth y por el receptor USB. En esta zona es donde hay un hueco para guardar ese pequeño receptor USB.

Las almohadillas de teflón no son especialmente grandes pero cumplen bien su función. Aunque desliza bien, no he notado que destaque especialmente en este apartado, y he probado recientemente al menos un ratón que es bastante mejor en este terreno. Pero insisto en que el ratón desliza bien, y teniendo en cuenta su peso de 60 g tampoco es que necesitara más superficie de teflón para deslizar a la perfección.

Características

Este M75 Air Wireless tiene un tamaño estándar de 128 mm × 65 mm × 41.6 mm con el mencionado peso de 60 g que junto con las almohadillas de teflón inferiores hace que deslice perfectamente. Tiene un diseño simétrico, pero es para diestros, perdiendo esa oportunidad de poner un par de botones más en el lado derecho a cambio de reducir al máximo su peso. Los botones principales son ópticos, con muy buena sensación de clic.

El sensor es un Marksman de Corsair, que es un modelo más que suficiente para las necesidades del 99.99 % de los jugones. Dispone de una sensibilidad de 26 000 PPP, con una velocidad de 650 PPS y una aceleración de 50 G. Se puede ajustar la sensibilidad de píxel en píxel a través de iCUE, estableciéndose por defecto una sensibilidad de 1200 PPP. Suele ser lo adecuado para la mayoría de usuarios, aunque he preferido dejarlo más cerca de los mil. Eso ya son cuestiones de gustos.

M75 Air Wireless de Corsair
Dimensiones128 mm × 65 mm × 41.6 mm
Peso60 g
Conexióncable, receptor USB
Manoderecha
Agarres preferentesgarra, yemas, palma
Sensibilidad26 000 PPP
Velocidad650 PPS
Aceleración50 G
Muestreo1000 Hz (2000 Hz con el receptor USB)
Botones adicionalesdos en el lateral izquierdo
Autonomía máxima
receptor USB: 34 h.
Bluetooth: 100 h.
Memoria internaun perfil
Extrasinterruptores principales ópticos, adaptador USB tipo C a USB tipo A
Cable1.8 m, tela trenzada, USB tipo C a USB tipo A
PVPR149.99 euros (oct. 2023)

La característica principal del receptor USB es que permite el muestreo a 2000 Hz, cual puede mejorar la precisión en juegos. No es algo que se vaya a notar de entrada, pero con el paso de las horas jugando se puede empezar a notar. El muestreo se puede cambiar en iCUE, el programa de configuración de todo lo de Corsair. Si se pone a 2000 Hz, sería recomendable no poner el receptor en sitios muy alejados o extraños, como por ejemplo detrás de un monitor. Esta última es una posición en la que me ha dado problemas y es donde suelo poner los receptores para probarlos.

La conexión Bluetooth 4.2 con baja energía, lo cual redunda en una mejor autonomía. La gracia de este ratón ultraligero es precisamente los 2000 Hz del receptor USB, o Corsair tiene alternativas de ratones ligeros bastante más baratos que este con prestaciones cercanas. Si se usa con el receptor USB, la autonomía vuela: hasta 34 horas. Por Bluetooth, con su muestreo a 1000 Hz, dura cerca de cien horas. Además cuenta con carga rápida, por lo que en solo 75 minutos puede recargarse de cero a cien.

Programa de configuración

La configuración del M75 Air Wireless se hace a través del habitual programa iCUE usado para todo lo de Corsair, tanto en Windows como macOS. En el programa se verá que aparece la configuración tanto del receptor USB como del propio ratón. En el receptor es donde se cambia el muestreo inalámbrico, que por defecto está puesto a 1000 Hz. También es donde se puede emparejar el receptor con un segundo periférico de Corsair, lo cual vendrá bien para liberar un puerto USB. No tiene nada más que configurarle.

El propio ratón no tiene gran cosa para configurar. Se puede asignar acciones distintas a los botones laterales o principales, pero no he visto que haya opción de asignar una segunda acción a cada botón como ocurre con los ratones de Logitech o Razer. Tampoco tiene la manera más intuitiva de gestionar los botones, que es algo a lo que la compañía tendría que darle una vuelta.

El sensor se puede configurar hasta los 26 000 PPP que tiene en incrementos de píxel en píxel, añadiendo también si se quiere varias etapas de desplazamiento. Si se asigna el modo francotirador a uno de los botones del ratón se podrá bajar al instante la sensibilidad al ajuste que pone de 'franco'.

En el programa no falta el apartado de calibración de superficie, que no es un proceso muy largo de hacer, y también está el de los ajuste generales del ratón. Eso incluye la búsqueda de nuevo firmware, el modo de reposo, un modo de correción de ángulo, se puede cambiar la distancia de elevación, o mejorar la respuesta de los botones.

Conclusión

El sector de los ratones ultraligeros con receptor USB de 2000 Hz se está haciendo cada vez más grande y el M75 Air Wireless es un modelo que, por su PVPR, puede resultar más interesante que otras alternativas actuales. Su ergonomía es muy buena, sus prestaciones también, y además tiene Bluetooth para los que preferimos esta conexión. Por ejemplo, el reciente Pro X Superlight 2 de Logitech, además de ser más caro no tiene Bluetooth.

La autonomía puede volar cuando se usa el receptor USB, pero teniendo en cuenta que en cualquier escritorio ya hay un cable USB tipo C conectado al PC no lo veo realmente un problema. Una autonomía de 25 a 35 horas por el receptor USB es una cantidad razonable —cuatro o cinco días de juego intenso—, y por Bluetooth aguanta mucho más del doble. Al menos por Bluetooth me ha aguantado una semana de uso trabajando y jugando algo, y le quedaba un 40 % de batería.

La conexión Bluetooth es muy estable, pero para la del receptor USB es preferible no dejarlo en sitios raros como un puerto USB detrás de un monitor. Por eso echaría en falta un adaptador USB tipo C a USB tipo A para ponerle en el cable y tener el receptor más cerca del ratón. No es que haya tenido problemas teniendo el equipo sobre la mesa, pero como digo, a 2000 Hz podría tener algún problema de conexión si el PC está muy alejado.

Por lo demás, el M75 Air Wireless es un modelo que no me ha parecido llamativo de entrada, pero al examinarlo y usarlo al final me ha encantado. Incluso más que otros que he probado similares últimamente, aunque sobre todo porque su precio es más bajo y, sobre todo, porque tiene Bluetooth. Al final estos ratones ya tienen ahora mismo las misma características —60 g inalámbrico con receptor a 2000 Hz—, por lo que el Bluetooth y el precio me resultan determinantes a la hora de comprar uno.