Blizzard tiene bien planificado el desarrollo de su juego de cartas virtual, HearthStone, y ha optado por actualizarlo con tres ampliaciones al año, dándoles además un nombre común. Tras el Año del Mamut, este año toca el Año del Cuervo, y la compañía da el pistoletazo de salida con la expansión llamada El bosque embrujado. En ella aprovecha para explorar uno de los lugares más siniestros de Azeroth, y más específicamente de los Reinos del Este, como es Gilneas.

Explorando los misterios de Gilneas

Gilneas fue una de las ubicaciones que llegaron a World of Warcraft en la expansión de Cataclismo e introducía a los huargenes, los pobladores de la región que se pueden transformar en lobo u hombre debido a una maldición druídica. Esta expansión explora el bosque embrujado, una región de Gilneas que oculta multitud de secretos y poblada por criaturas tan letales como terroríficas. Al menos, eso es lo que dice el tráiler que tenéis arriba.

Las nuevas cartas de esta ampliación añaden dos nuevas mecánicas al juego, en torno a las que giran muchas de las cartas que se han incluido. Por un lado está la nueva palabra clave eco, que hará que la carta que la lleve pueda ser lanzada varias veces consecutivas en el mismo turno siempre que se tenga maná suficiente como para invocar las réplicas.

Además, hay dos personajes incluidos como legendarios —y que podéis ver en las cartas de ejemplo del siguiente apartado—, que tienen un término clave llamado inicio de partida. Son Baku la Devoralunas y Genn Cringrís, que dan ventajas especiales al héroe si solo se tienen cartas de corte impar o par en el mazo. Genn hará que el poder de héroe cuesta solo uno de maná, y Baku potenciará el poder de héroe.

En otro orden de cosas, con esta ampliación han pasado al formato salvaje las cartas de las expansiones Susurros de los dioses antiguos, Una noche en Karazhan y Mafias de Gadgetzan.

Muchos sobres por abrir

No se puede hacer un buen análisis de una expansión de HearthStone sin abrir una buena cantidad de sobres, que es donde siempre reside la gracia de estos juegos coleccionables. Blizzard ha proporcionado 70 sobres para realizarlo —a quien agradecemos su colaboración—, ya que en esta ocasión la precompra habitual de 50 euros reportaba en realidad 70 sobres, y con la que se obtenía el dorso de carta conmemorativo de esta ampliación. Por entrar a jugar a la expansión se reciben tres sobre completamente gratuitos.

En el vídeo que encontraréis más abajo se recoge la apertura que hice de esos 73 sobres —como siempre, terriblemente aburrido—. Puesto que han dejado en esta ocasión el contenido para un jugador para una actualización posterior al lanzamiento de la expansión —un par de semanas—, no hay material adicional que poder mostrar en el vídeo.

La apertura de estos sobres se resume en 365 cartas distribuidas en:

  • 72.6 % comunes (265).
  • 23 % poco comunes (84).
  • 3.2 % épicas (12).
  • 1 % legendarias (4).

Además, salieron diez doradas, o un 2.7 % sobre el total de 365 cartas conseguidas en los sobres. El balance no es malo del todo, aunque proporcionalmente en 50 sobres de la expansión anterior hubo más legendarias y épicas. Pero «50» no es una muestra estadística con la que se pueda establecer un patrón conciso, y en realidad el resultado no está del todo mal —y podría haber sido peor—.

ComunesRarasÉpicasLegendariasDoradas
Viaje a Un'Goro72.5 %21.6 %5.2 %0.7 %3.34 %
Kóbolds y catacumbas68.8 %24.4 %4.8 %2 %3.6 %
El bosque embrujado72.6 %23 %3.2 %1 %2.7 %

Blizzard añade en esta expansión 135 nuevas cartas, con nuevas mecánicas que hará que se tengan que crear mazos más específicos en torno a ellas, sobre todo por la palabra clave eco. Algunas cartas anteriores pasan al formato savlaje, por lo que está prohibido su uso en los enfrentamientos clasificatorios.

A continuación hay algunos ejemplos de las cartas que se pueden encontrar en El bosque embrujado.

El comienzo del Año del Cuervo

Los diseñadores de juegos de cartas siempre buscan con cada expansión que las mecánicas de juego cambien añadiendo nuevas cartas con habilidades especiales o que sean el pilar de nuevos tipos de mazos. Esto hace que los jugadores veteranos se mantengan en el juego o que regresen a él, y quizás de momento no lo consiga Blizzard con estas nuevas 135 cartas. Todavía falta la activación del contenido que más estoy esperando como es el de caza de monstruos.

Se trata de un modo de juego gratuito que llegará en breve, pero del que Blizzard no ha dicho casi nada. Por eso tampoco voy a poner nota a expansión todavía, a la espera de probar dicho modo de juego. De momento las cartas introducidas son interesantes y hace replantearse la estrategia general de los mazos, sobre todo para contrarrestar aquellos que hagan un uso extenso de las cartas eco. Hay suficientes cartas como para pasearse algunas horas analizando estrategias, gastando polvo para crear las que se necesiten, y poner a rodar los mazos.