Se puede decir que cuando Nintendo se pone a hacer un juego, lo hace bien o no lo hace. Es el motivo por el que de Legend of Zelda: Tears of the Kingdom solo se están escuchando cosas positivas, aunque claramente la potencia de la Switch ha llegado a su límite y pide un nuevo modelo que no llegará hasta al menos el próximo año. Mientras tanto, Nintendo sigue haciendo caja con sus juegos, porque esta entrega de Zelda ha vendido ya más de diez millones de copias en tan solo tres días.
Decía Poor-man, nuestro nintendero oficial, en el tráiler de la película de imagen real de Five Nights at Freddy's que este titular no daba más de sí. Pues acepto el reto, porque se pueden decir algunas cosas del nuevo Zelda que explican por qué los nintenderos apoyan de manera acérrima a su compañía.
Dejando algún problema de rendimiento que surge por la poca potencia de la Switch para los estándares actuales, el juego ha llegado casi exento de fallos. Bueno, esos problemas de rendimiento pueden suponer que la tasa de fotogramas caiga a los 20 f/s en lugar de los 30 f/s habituales en mitad en zonas concurridas o que los tiempos de carga sean más largos que en la entrega anterior, lo cual sí será algo molesto.
Aunque obviamente no está exento de fallos, está muy lejos de sufrir los fallos generalizados de los últimos títulos AAA. Uno de los descubiertos es la posibilidad de duplicar cualquier objeto, que es un fallo bastante sencillo de explotar. Hay otro que puede provocar que se reinicien ciertas misiones, sobre todo las de uno de los poblados, lo cual va a resultar bastante molesto, aunque no es nada frecuente que ocurra.
¿Tiene Nintendo mejores testeadores de juegos? Igual sí, o quizás simplemente le dedica más tiempo al desarrollo de sus juegos, mientras que el resto de compañías van a matacaballo.
Vía: TechPowerUp.