Tom Hardy tuvo la suerte de participar, brillantemente, en Mad Max: Furia en la carretera —aunque no había mucho que interpretar en ella—, cuya presencia tendrá continuación en Mad Max: El yermo. Quizás por eso lo eligiera Sony para protagonizar la cinta de Veneno, el archienemigo de Spider-Man, y creado por Todd McFarlane y David Michelinie. El estilo único de dibujo de McFarlane siempre ha jugado a favor de este personaje, aunque está por ver cómo quedará plasmado ese estilo indiscutible ligado a Veneno en la gran pantalla.
El tráiler de avance que ha publicado Sony Pictures —estudio del que se ha llegado a decir que podría ser comprado por Disney tras completar la compra de la Fox— no dice gran cosa de la película, aunque pone de momento un tono sombrío a la misma. No se ve a Veneno en acción, y solo a un Eddie Brock semitraumatizado y huyendo.
Los rumores dicen que podría aparecer Tom Holland —el actual Spider-Man de Marvel Studios—, pero teniendo en cuenta que en esta cinta no interviene directamente Marvel Studios, sino que es un intento de Sony por rentabilizar la cooperación con Marvel que ha supuesto Spider-Man: Homecoming, no creo que aparezca y la película en sí me da especial miedo.
Si es difícil hacer las cosas mal con Spider-Man —y Sony lo ha conseguido varias veces—, hacerlo con Veneno es mucho más fácil y el resultado puede ser catastrófico. Con un poco de suerte los responsables del estudio han aprendido algo de Marvel y termina saliendo una buena película. Con este personaje no hay término medio que valga. Sobre todo como intenten ponerle como superhéroe y no como supervillano.
Veneno se estrena el 5 de octubre.