Linus Torvalds, el creador de Linux, por una vez no ha levantado el dedo corazón a Nvidia por su escaso apoyo a la plataforma, si no el dedo pulgar aprobando la iniciativa de liberar los drivers del Tegra K1 como open source. Este nuevo procesador será el que llegue en versión de 64 bits después del verano con soporte para gráficos OpenGL 4.4, y con una potencia de una tarjeta gráfica de gama de entrada.
Esta decisión de liberar el software relacionado con el Tegra K1 como open source va a permitir que se realice una mejor integración de los drivers con Linux, lo cual va a beneficiar enormemente al rendimiento del procesador bajo Linux. Eso incluye también su uso en Android, por lo que puede que este movimiento no sea nada altruista por parte de Nvidia ya que es un sector en el que no está consiguiendo de momento la atención de los fabricantes.
La reacción de Torvalds contrasta con la de 2012 en la que mandó a la mierda a Nvidia por su escaso apoyo a Linux.
Vía: CNet.