Ciertos lugares de las ciudades siempre son más visitados que otros, y si son zonas de turismo nocturno (léase zonas de marcha), hay muchas posibilidades que sus paredes terminen mojadas por la noche gracias a aquellos que vacían sus vejigas de camino a casa (o a su hotel). Es algo que quieren atajar en uno de los distritos más visitados de Hamburgo, Sankt Pauli.
La asociación de comerciantes del distrito quiere evitar que los transeúntes sigan meando en el lugar por las noches y que a la mañana siguiente huela la zona a meado. Para ello quieren añadir una capa hidrofóbica especial a las paredes, desarrollada originalmente por Nissan para repeler el barro y otras sustancias, que hace que el chorro de la meada sea rechazado y rebotado con más fuerza en la dirección del ¿vándalo? En fin, no sabía muy bien cómo dar la noticia, así que un vídeo vale más que mil palabras (porque además está en alemán, y no es mi fuerte).
Vía: EnGadget.
