La situación de BlackBerry no es la mejor del mundo, pero su director ejecutivo John Chen quiere corregir el rumbo financiero de la compañía. Creo que todas las notifcias relacionadas con BlackBerry las comienzo igual, pero es porque me parece una pena la situación que están pasando. BlackBerry 10 me parece un buen producto, pero muy desaprovechado y que ha llegado tarde.
Aunque el negocio principal de la compañía era el de la venta de teléfonos (hasta hace tres años era el principal vendedor a nivel mundial), la falta de suficientes ventas en el sector de los smartphones ha hecho que sus ventas se hundan en este tiempo. John Chen tiene que salir continuamente a defender la posición de la compañía y a asegurar que va a seguir fabricando y vendiendo teléfonos.
Incluso su fortaleza de las Filipinas se está tambaleando, y BB Messenger ya no es lo que era. Para este año Chen confirma que tienen cuatro teléfonos: Leap, que ya está a la venta; Slider, un nuevo teléfono con teclado deslizable; y otros dos que no se conocen todavía. Estos teléfonos pueden ser el Oslo, similar al diseño del Porsche Design P'9884 con teclado físico, una nueva edición del Classic, con mejoras en el hardware y actualizado a los tiempos que corren, o incluso un nuevo teléfonos de gama baja que sustituya al Q5.
Aunque en realidad en lo que también se tiene que centrar BlackBerry es en mejorar BlackBerry 10, ya que si bien cuenta ahora con acceso a la tienda de aplicaciones Amazon Appstore de Android, el sistema operativo en sí requiere de importantes mejoras porque es un buen producto pero sin pulir, con diversos problemas de usabilidad. Nada que un poco más de desarrollo no pueda solucionar.
Vía: Ubergizmo.