El número de campañas de Kickstarter que consiguen superar su objetivo de financiación pero no terminan llegando al mercado o a los patrocinadores va en aumento. Pero también el número de denuncias por engaño, algo bastante habitual en EE. UU.
El proyecto en disputa era uno relacionado con la creación de un mazo de cartas con arte de horror Asylum Playing Cards. El autor recaudó 25.000 dólares de los 15.000 que solicitaba para la financiación, pero nunca llegaron los mazos a los patrocinadores a finales de 2012 como estaba previsto.
Un juez de Washington ha estimado que el autor debe reembolsar a los patrocinadores el dinero que invirtieron, aunque sólo afecta a los residentes en el estado de Washington, por lo que sólo tendrá que devolver el dinero a 31 de los 810 patrocinadores. Pero abre las puertas a que se tomen decisiones similares en otros estados y países.
Aunque Kickstarter cuenta con personal encargado de vigilar que los proyectos que se inician son legítimos y no estafas, siempre hay posibilidades de que finalmente el patrocinado no se encargue del proyecto y huya con el dinero bajo el brazo.
Vía: TechSpot.