La presentación del Nexus 5X no ha dejado a nadie indiferente, aunque también es dependiendo del lugar del mundo en el que se viva. En EE. UU. se ha convertido de la noche a la mañana en un éxito por su hardware y precio, pero la fortaleza del dólar ha hecho que en el resto del países vaya a ponerse a la venta a un precio superior al que muchos esperaban. Un golpe de la dura realidad.
iFixit ha tenido la posibilidad de desmontar el Nexus 5X, y la primera conclusión clara que han sacado es que es muy fácil de abrir y reparar, dándole una nota de 7 sobre 10. El sistema de reconocimiento de huellas se llama Nexus Imprint, como contraposición a Touch ID de los iPhone, y Google asegura que responde en menos de 600 ms. Sigue sin gustarme su posición trasera, pero dependerá del modo de emplearlo por cada usuario.
Los 2 GB de memoria incluida son de Samsung, los 16 GB de almacenamiento son de Toshiba, y Qualcomm es el fabricante de los chips de LTE, carga rápida, gestión de corriente, Wi-Fi 802.11 ac, y el códec de audio (es el mismo que el utilizado en el LG G4 y el OnePlus 2). Posee un sencillo LED de notificaciones en la zona superior de la pantalla.
Tampoco se puede decir mucho más de interés en un desmontaje que no trae sorpresas. Como ya es habitual, el panel de la pantalla y el cristal protector están fundidos, por lo que si se rompe la pantalla hay que cambiar ambos, con el mayor coste que supone eso. La batería no es fácilmente sustituible por el usuario, y hay que desmontar algunas piezas previamente. Por lo demás, es un buen teléfono fabricado por LG bajo el sello Google.
