Xiaomi está dando pasos para poder realizar una expansión mundial, y para ello tiene que salvar el pequeño gran escollo que es el tema de las licencias de patentes. Los teléfonos de Xiaomi son baratos porque no pagan el uso de patentes en Europa y Norteamérica. Por eso la compañía ha adquirido 1.500 patentes de Microsoft relacionadas con tecnologías utilizadas por los teléfonos por una suma que no ha sido revelada.
Dentro del acuerdo también se realizará un intercambio para el uso de las patentes de ambas compañías, que siendo Microsoft una de las tecnológicas que más tienen va a beneficiar aún más los intereses de Xiaomi por expandirse a Europa y EE. UU. A cambio Xiaomi preinstalará en sus terminales tanto Office como Skype.
El movimiento sigue la presentación hace unos días de un centro multimedia desarrollado junto a Google, el Mi Box. Con la ayuda de Microsoft y Google, la expansión a nuevos mercados de Xiaomi está prácticamente asegurada, y quizás se vea antes de finales de año.