La tecnología aplicada a la medicina es uno de mis usos favoritos de esta, ayudando a superar la barreras que nos pone la naturaleza. En este caso el avance no es tan impresionante como útil, ya que hay poco glamour en suturar heridas, pero se trata de un proceso fundamental en la medicina y que acaba de ser mejorado.
En la universidad Tufts, en Massachusetts, han tenido la idea de crear unos hilos inteligentes, mezclando varios materiales algunos naturales como el algodón y otros sintéticos, con una serie de sensores que son capaces de medir valores del cuerpo humano tales como nivel de glucosa, temperatura, ph de la piel, así como otros valores referidos a la propia sutura como es la tensión y el estrés a los que está sometida la piel. Además (y ante la dificultad de añadir un conector USB imagino), el hilo podrá enviar data de forma inalámbrica y automática toda la información recopilada directamente a los médicos.
Por supuesto, también se han pensado otros usos para estos hilos, como la fabricación de vendajes, e incluso otras opciones más allá de la medicina, como su inclusión en prendas de vestir comunes.