Google decidió hace unos años poner a la venta el Nexus 4 debido a la falta de teléfonos competentes para hacer funcionar Android y que proporcionarán una buena relación de calidad-precio. Aunque parezca una eternidad, eso fue hace tan solo cuatro años, y mucho ha llovido desde entonces en el mundo androide.
Cuatro años después, y desde hace dos años que llevamos con el mercado literalmente inundado de ofertas de teléfonos chinos baratos y decentes, la línea Nexus de teléfonos ha tocado a su fin. La presentación de los teléfonos Pixel era el primer indicio de ello, y lo ha corroborado Google con un "no tenemos planeado nuevos dispositivos Nexus".
Google se ha convertido de la noche a la mañana en un nuevo aspirante a Apple, en el sentido de que quiere fabricar hardware y sustentarlo con sus sistemas operativos, servicios de internet y aplicaciones. La línea Nexus representaba dispositivos para los que Google ponía los programas y servicios, y que otra compañía se encargaba de diseñar y fabricar.
Dar el paso a la fabricación de dispositivos era uno que iba a ocurrir tarde o temprano, y que dentro del panorama actual tiene más sentido que nunca. Por ahora Google se va a limitar a dispositivos de gama alta, o aquellos que no tienen rivales directos por parte de sus socios comerciales de Android. Los tiempos de los Nexus baratos actualizados directamente por Google se acabó con el Nexus 5X.
Vía: The Verge.