China es una gran fuente actual de avances tecnológicos, pero el Gobierno se quiere asegurar que no se consiguen a base de engaños. Por eso han empezado a investigar uno de los sistemas de transporte más curiosos presentados en los últimos tiempos, que era un autobús-tren elevado que circularía por raíles por encima de los coches.
La captación de fondos se realizó a través de la plataforma Huaying Kailai, y la policia de Pekín ya ha detenido a más de 30 personas relacionadas con el caso. Los implicados obtuvieron en torno a 9100 millones de yuanes, unos 1175 millones de euros.
La demanda ha sido presentada por varios implicados. Por un lado los inversores, ya que desde octubre del año pasado no se habían realizado avances en su desarrollo. También por la firma Autek que diseñó los autobuses, que todavía no ha recibido el pago por sus servicios. Por último, la ciudad donde se construyó el tramo de prueba, Qinghuangdao, ya que desde el 31 de agosto del año pasado, momento en el que expiraba la licencia, no se había limpiado la zona y ha procedido a demoler las vías.
Vía: EnGadget.