Motorola está volviendo a la primera plana, recuperada como marca por Lenovo para intentar dar un empujón de ventas a sus teléfonos. Ahora ha presentado una versión del Moto G5 en forma del Moto G5S, junto con su phablet hermana Moto G5S Plus. El diseño externo es similar, agradable y distinto a lo que se ve en el mercado chino, con diseño en aluminio de una sola pieza.
El Moto G5S incluye un procesador Snapdragon 430 de ocho núcleos Cortex-A53 a 1.4 GHz y GPU Adreno 505. El Moto G5S Plus tiene un procesador Snapdragon 625 de ocho núcleos Cortex-A53 a 2 GHz con GPU Adreno 506. Ambos teléfonos dispone de 3 GB de RAM, 32 GB de almacenamiento y lector de tarjetas micro-SD de hasta 128 GB.
Las pantallas son de 5.2 y 5.5 pulgadas con resolución 1080p de tipo IPS, e incluyen batería de 3000 mAh, para la que Motorola promete que con 15 minutos de carga hay suficiente para cinco horas de uso del teléfono. Mientras que el G5S incluye una cámara de 16 Mpx capaz de grabar vídeo a 1080p, la del G5S Plus tiene una doble cámara trasera de 13 Mpx capaz de grabar a 4K. En la parte frontal tiene un lector de huellas dactilares.
El Moto G5S tiene un PVPR de 249 euros y el G5S Plus un PVPR de 299 euros. Estarán disponibles en versiones con una o dos ranuras para tarjetas SIM, así como con versiones de 4 GB y 64 GB de almacenamiento.