Gigabyte es conocida por su serie de tarjetas gráficas compactas que sirven perfectamente en los mini-PC más compactos de placas mini-ITX. Ya presentó versiones de la GTX 1060 y 1070 en este formato, y ahora le ha llegado el turno a la GTX 1080 Mini ITX 8G. Esta tarjeta gráfica cuenta con un grueso disipador de aluminio atravesado por tres caloductos de cobre de contacto directo, y refrigerado por un ventilador de 90 mm de funcionamiento semipasivo.
El tamaño de la tarjeta gráfica, incluyendo la cobertura de plástico, es de 169 × 131 × 37 mm, que es bastante inferior a otros modelos muy comunes como la GTX 1080 Armor de MSI, que tiene 279 × 140 × 37 mm. La GPU está ligeramente subida de fábrica, con una frecuencia base/turbo de 1632/1771 MHz, frente a los 1607/1733 MHz del chip de referencia.
Dispone de un conector de alimentación PCIe de ocho pines, y cuenta con un DVI-D, un HDMI 2.0, y tres DisplayPort 1.4. La fuente de alimentación recomendada es de 500 W, que no suele ser tan común en los mini-PC más pequeños por el calor que supone un consumo tan alto para un equipo pequeño —aunque el consumo real de un i7-7700 con este GTX 1080 podría rondar los 250 a 300 W en carga—.
Vía: The Tech Report.