AMD está teniendo un gran éxito con su arquitectura Zen, incluidos en las pastillas Zeppelin que conforman los procesadores Ryzen. Esa arquitectura multichip en un solo encapsulado le ha validado a AMD para presentar el reciente Ryzen Threadripper 2990WX de 32 núcleos físicos con multihilo compuesto por cuatro pastillas Zeppelin, y un rendimiento multihilo de sobresaliente. La versión para el sector empresarial, los EPYC, usan el mismo zócalo y sistema de montaje, y se trató en 2017 de la primera incursión en años de AMD en el sector empresarial de los centros de datos.
Las mejores ventas de los EPYC y Ryzen se están notando en las cuentas de resultados de AMD, forzando según ServeTheHome a que Intel realice mayores descuentos por volumen por la compra de procesadores Xeon. Por si no fuera poco, Intel también estaría proporcionando importantes descuentos a la compra de una cantidad de procesadores muy inferior a los habituales palés de mil procesadores. No creo que los problemas de seguridad Meltdown y Spectre y los continuos parches que disminuyen el rendimiento en ciertas cargas de trabajo de los Xeon hayan agradado tampoco a las compañías.
Suelo decir que la competencia de los procesadores Ryzen y EPYC los tiene Intel en el mercado, y que lo único que tiene que hacer la compañía es bajar su precio. Eso es algo que difícilmente fuera a hacer con los Ryzen recién puestos a la venta a principios del año pasado, pero teniendo en cuenta la mejora sustancial de rendimiento y eliminación de problemas de esta segunda generación Ryzen, ahora sí están haciendo mella en las ventas de los procesadores de Intel. Este es el momento en que la compañía tiene que bajar los precios y aparentemente lo está haciendo, y lo va a seguir haciendo. Ofrecer un Core i9-9900K, como parece que va a hacer, por un precio de unos 450 dólares de PVPR frente a un Core i9-7900X del doble de PVPR y rendimiento similar es solo un paso más hacia esa bajada de precios.
Vía: Hot Hardware.