En las últimas semanas ha habido quejas crecientes sobre las características de los nuevos portátiles con las RTX 30 de movilidad. Se centran en que algunos fabricantes son opacos con respecto a las características de las gráficas que incluyen ya que NVIDIA les da la opción de usar la versión completa del chip o uno recortado en frecuencias y consumo. Vaya por delante que me parece bien porque no es lo mismo en refrigeración un ultraportátil que uno de 5 cm de grosor. Lo que no me parecía bien es que no se fuera claro al indicar las características de las GPU usadas en los portátiles.
Eso va a cambiar porque un portavoz de NVIDIA ha indicado a PC World que ahora están solicitando a los fabricantes de equipos originales que actualicen las páginas de sus productos con la información específica de las RTX 30. Esos incluye las frecuencias de funcionamiento y el consumo para que «indique el rendimiento esperado de la GPU del equipo». Esto se aplica a las versiones Max-Q, por lo que entiendo que si usa la versión completa no hace falta que se indique nada, pero me imagino que aun así las compañías también lo indicarán. Al menos que sean claras a la hora de diferenciar bien entre RTX 30 y RTX 30 Max-Q.
La diferencia de rendimiento entre, por ejemplo, una RTX 3060 de movilidad de 115 W y una RTX 3060 Max-Q de 80 W puede ser de hasta el 25 %, aunque más bien de media si sitúa en torno al 11 %. Dicho de otra forma, por lo que no me parece mal es porque el modelo de 115 W solo supone un 11 % de mejora de rendimiento por un 43 % más de consumo respecto al modelo de 80 W. Para ultraportátiles o equipos más generalistas con menos capacidad de refrigeración la versión Max-Q es ideal. Siempre, claro está, que el consumidor sepa perfectamente lo que está comprando, y es lo que se llevaba tiempo pidiendo a NVIDIA.
Vía: PC World.