Si algo ha quedado claro del lanzamiento de los Ryzen 9 7900X3D y 7950X3D es que hay que esperar al Ryzen 7 7800X3D que se pone a la venta en abril. Los vende como procesadores para jugar, pero sin embargo esos Ryzen 9 desactivan la mitad de sus núcleos cuando se juega, por lo que… se quedan como unos 7600X y 7700X mejorados con su chip de caché adicional de 64 MB. Por eso no vale la pena el precio que cuestan, y por eso hay que esperar al 7800X3D. Unas trasparencias oficiales de AMD hablan de que dará un 20 % más de rendimiento que el Core i9-13900K… a FHD.
La compañía no indica qué tarjeta gráfica ha probado, aunque es de imaginar que habrá sido la RTX 4090 y de ahí que no lo diga. Tampoco es que vaya a haber mucha gente que compre una RTX 4090 para jugar a FHD, o al menos lo desaconsejaría porque no tiene mucho sentido. En un uso a QHD las distancias se recortarán, y a UHD va a ser poca la diferencia entre ambos procesadores, y también frente a otros más económicos como el 7700X, 7600X, 13600K, etc. Con tarjetas gráficas menos potentes la diferencia también será menor. Por eso este tipo de comparativas hay que cogerlas con cuidado.
Eso sí, el 7800X3D es el procesador que va a ser más interesante para jugar si realmente gana al 13900K, y me imagino que viendo lo que se ha visto del 7950X3D, lo va a ganar seguro. Tiene un PVPR de 449 dólares frente a los 589 dólares del 13900K, y es de imaginar que los usuarios invertirán en DDR5 y una placa base decente, si bien el 13900K se podría abaratar con DDR4, pero aun así la plataforma AM5 va a estar bastantes más años en el mercado que la LGA 1700. El 7800X3D me parece ahora mismo más interesante para jugar, incluso si AMD dice que será algo menos potente que el 7950X3D en juegos. Menos de un 5 % de diferencia por 250 dólares menos parece una buena inversión.