Dentro de los productos para audio que tiene Trust se encuentran los GXT 498 FORTA, un modelo licenciado oficialmente para uso con las PlayStation que además resulta interesante por su PVPR comedido de 50 euros. Es un punto de precio del que muchos compradores no pasan a la hora porque ya supone un coste importante, pero es un punto de precio en el que hay muchísima competencia.
Videoanálisis
Desembalado
Los GXT 498 FORTA llegan en una caja blanca y azul en el que muestran claramente que son un producto oficial para PlayStation 5. Trust destaca el potente sonido que supuestamente tienen, que usan unas almohadillas cómodas para las copas, y por alguna razón que tienen la capacidad de silenciar el micrófono. Más interesante es, para los tiempos que corren, que el plástico usado en su fabricación es en un 85 % reciclado. En la parte posterior abunda en estas características.
Al abrir la caja lo primero que se ve es el micrófono, que es flexible y retirable como una toma de 3.5 mm, y una espuma para reducir ruidos. También hay un cable de plástico flexible de 1.2 m de longitud, adecuado para conectarlo al mando de la PlayStation 5 pero no tanto para un PC, del que la compañía indica que funcionará pero que no da garantías para ello. Al menos en mi PC y en el Mac Studio que uso funcionan correctamente, así como en una Xbox One X y una Switch.
Los auriculares están metidos en una bolsa de protección. Nada más sacarlos de ella dan muy buena sensación en la mano por el precio que tienen, tanto por calidad de fabricación como por el peso, que está en lo normal para unos microauriculares de este tipo, sobre los 250 g. El plástico de la diadema está forrado internamente de tela con una almohadilla de cierto grosor, mientras que en el exterior tiene goma en lugar de ser simplemente el plástico que le daría un aspecto más de juguete como otros muchos auriculares baratos. Un punto a su favor.
Las copas son extensibles, aunque no disponen de una graduación y no se fijan con fuerza, lo cual dificulta atinar bien a la hora de extender ambas la misma distancia. También dificulta volver a ponerlas en la posición adecuada tras cerrarlas o al moverlas por error al dejar los auriculares en la mesa. Pero teniendo en cuenta que una vez encuentras el punto para situarlas sobre la cabeza, resultan unos auriculares cómodos por norma general, aunque eso sea algo subjetivo.
Las copas tienen una almohadilla de menos de dos centímetros de grosor, forrada de cuero sintético por el exterior y de tela en la parte interior por lo que evitará dar más calor de la cuenta durante el verano. Las almohadillas son intercambiables, que en unos auriculares de solo 50 euros de PVPR es bienvenido. El cuero sintético usado claramente no es el mejor del mercado, pero no es tampoco del barato. Está en un término medio, y adecuado para lo que cuestan.
En la copa izquierda es en la que se sitúa toda la electrónica. Se puede ver la toma del micrófono retirable, la del cable con toma de 3.5 mm, la rueda de volumen y un interruptor para silenciar el micrófono.
La única pega que tengo con el ajuste de estos auriculares, que se pueden usar sin problemas con gafas, es que solo permiten el ajuste de las copas en vertical y no en horizontal. Pueden quedar un poco separadas del oído, aunque a mí se me acomodan bastante bien. Al principio los noté algo incómodos, pero echando la diadema un poco más para atrás sobre la cabeza consigue encontrar un punto en el que me he sentido bastante cómodo usándolos durante varios días jugando y trabajando.
Características
Los transductores de estos auriculares son de 50 mm, con una respuesta en frecuencia entre los 20 y 22 000 Hz. Tienen una impedancia de 32 ohmios y una sensibilidad de 90 dBm. En la reproducción del sonido están claramente potenciados los graves, desplazando ligeramente las frecuencias medias. Como no tienen una frecuencia en respuesta plana, y distan algo de ello, tampoco es algo que se note especialmente.
Sí se nota que el sonido no tiene excesiva precisión y algo enlatado, pero se escucha bien. Llega a reproducir medianamente bien los graves más profundos, aunque los de otros auriculares como los bastante más caros QuietComfort 35 de Bose que uso a diario los reproduce claramente mejor. Pero aun así, en juegos dan muy buena sensación de inmersión, escuchándose bien explosiones, disparos o pasos.
GXT 498 FORTA de Trust | |
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Tipo | Circumaurales cerrados |
Conexión | Cable 3.5 mm |
Respuesta en frecuencia | 20 a 22 000 Hz |
Transductores | 50 mm de neodimio |
Impedancia | 32 Ω |
Sensibilidad | 90 dBm |
Micrófono | unidireccional flexible y retirable |
- Frecuencia | 100 a 17 000 Hz |
Funciona con | Windows, macOS, PlayStation, Xbox, Switch, Android, iOS |
PVPR | 49.99 € |
Filtran bastante ruido hacia el exterior, por lo que, más allá de un 15-20 % del volumen máximo, los de alrededor podrán escuchar la música que estés reproduciendo. Por eso tampoco tapan mucho el ruido del exterior, lo justo.
En cuanto al micrófono, que sea retirable siempre es una importante ventaja. Si quieres estar seguro de que el micrófono no graba, simplemente lo quitas. También facilita su uso transporte o incluso su uso en transporte público, aunque recomiendo por seguridad jamás usar auriculares fuera de casa. Distrae excesivamente y más vale prevenir que curar.
La calidad de grabación es bastante buena, aunque con algunas condiciones. Por el tipo de micrófono que es, hay que tenerlo lo más cerca de la boca que sea posible para que no haga falta aumentar el sonido de la grabación. En caso contrario, puede apreciarse mucho ruido de fondo que si se grabara a cero decibelios de modificación. Si se evita ese ruido de fondo, la voz se graba con buena calidad, suficientemente natural, aunque ligeramente enlatada.
Microauriculares baratos y competentes
No todo el mundo tiene cien euros para gastarse en unos microauriculares, por lo que siempre me gusta analizar modelos como los GXT 498 FORTA de Trust. Con su precio de 50 euros, tiene algunos competidores importantes, pero los usuarios buscan un buen equilibrio entre comodidad, sonido y calidad de fabricación que suele ser imposible de conseguir. Los Trust no son distintos, por lo que distan mucho de ser unos auriculares perfectos, aunque sí bastante buenos para su precio.
La ergonomía de los auriculares no me ha terminado de convencer, aunque tampoco es mala: está en la línea de lo que cuestan. Los noto solo ligeramente molestos en la cabeza, que es una sensación que tardo un rato en obviar cuando me los pongo, y el hecho de que las copas no se puedan mover aunque fuera ligeramente en horizontal, solo en vertical, hace que los note extraños sobre las orejas. Eso sí, no me han molestado nada de nada con las gafas puestas, que ya es algo positivo.
La forma en que se extiende la diadema, de manera lineal en lugar de por las habituales muescas que permiten un ajuste simplificado, me ha complicado conseguir la extensión óptima de la diadema. Al no tener muescas ni marcas de ningún tipo, es un proceso que habrá que repetir una y otra vez cuando se replieguen las copas. Aun así, me ha llamado positivamente la atención la calidad de fabricación, con almohadillas retirables, una estructura rígida con buena sensación al tacto, y un acolchado de la diadema con tela, que lo prefiero porque si se usa el cuero sintético, cuando se desgasta no se puede cambiar.
En cuanto al sonido, no está mal, pero como microauriculares baratos que son tienen sus pegas. Para jugar son bastante buenos ya que tienen unos graves potenciados, llegando a reproducir los graves más profundos aunque cierta pérdida de definición. Eso es bastante bueno para los juegos donde predominan disparos y explosiones de todo tipo y es un terreno en el que se notarán unos auriculares buenos.
A la hora de disfrutar música suenan bien, pero tienen sus problemas. No tienen una respuesta en frecuencia plana, y el desplazamiento a potenciar los graves arrastra a las frecuencias medias, que suenan un poco enlatadas. Las frecuencias altas no suenan del todo mal, pero el audio tiene una clara falta de precisión. Tampoco es que nadie vaya a esperar unos microauriculares para audiófilos por menos de cincuenta euros, por lo que creo que al menos mantienen bastante bien el tipo en este terreno. Si no sabes lo que estás buscando de sonido en las canciones, en general suenan bien.
Se ve compensado por la calidad del micrófono, que es bastante buena. El tipo de micrófono que es tiene sus peculiaridades, como he comentado anteriormente. Por ejemplo, que es mejor tenerlo muy cerca de la boca para dejar a cero decibelios el balance de grabación para que no meta ruido de fondo. Si se sube, es un micrófono que meterá frente a otros mucho más ruido, aunque la voz se seguirá escuchando muy clara. La prueba de grabación del videoanálisis la hice con el micro casi pegado a la boca y sin modificar el nivel del sonido de grabación.
Dicho lo anterior, no hay mucho más que añadir al ser un modelo cableado con toma de 3.5 mm. Sirven para cualquier plataforma, y aunque sean licenciados para PlayStation sirven igual de bien para PC, Xbox, Switch o dispositivos móviles. Es positivo que el micro sea retirable, los controles integrados en las copas funcionan bien, y aunque las almohadillas de las copas podrían ser algo más gruesas, en general deberían ser cómodos para la mayoría de usuarios, aunque eso sea algo subjetivo.