Razer ha renovado sus auriculares BlackShark v2 Pro, que datan de 2020, con un modelo de 2023 con un par de novedades que los convierten en mejores, aunque a la vez son algo más caros. El diseño es prácticamente igual, unos cirumaurales de diadema acolchada forrada de tela y cuero sintético, con copas extensibles con un método que no me terminó de gustar cuando los probé. El diseño de las copas es similar, con un buen acolchamiento y forrados de tela.
Lo que eché de menos es la falta un conector USB tipo C, que ahora sí tiene, además de la conexión Bluetooth, que es el añadido más importante en esta revisión tres años después de su lanzamiento. Mantienen su uso mediante un adaptador USB, pero pierden la toma de 3.5 mm por lo que son algo menos versátiles. Se podrá usar en PC, PlayStation, y dispositivos móviles, pero no con la Xbox.
Las características técnicas son iguales. Tienen unos transductores de 50 mm de tipo TriForce Titanium que separa los graves, medias y agudos para que tengan una mejor definición. Tienen una respuesta en frecuencia entre los 12 y 28 000 Hz, con una impedancia de 32 ohmios y una sensibilidad de 100 dB.
El micrófono es de tipo unidireccional con una respuesta en frecuencia de 100 a 10 000 Hz, con una sensibilidad de –42 dB. Los auriculares incluyen controles para el volumen, además de sonido espacial THX, que da bastante buen resultado. La autonomía usando Bluetooth se sitúa en las 70 h.
Su precio es de 230 euros o 200 dólares. Estarán disponibles en blanco, negro y una edición temática de Rainbow Six: Siege.
