Es cierto que la memoria QLC tiene menos durabilidad que la TLC y que eso puede ser importante para ciertos casos de uso, pero SK Hynix, a través de su filial Solidigm —la antigua división de las SSD de Intel— ha venido a solucionarlos. El uso de este tipo QLC de memoria NAND 3D en los centros de datos era raro salvo en aquellos sistemas mayormente de lectura, pero ahora la cuarta generación de su QLC hace que ofrezca a las empresas un buen nivel de durabilidad con la serie D5-P5430.
La memorai NAND usada tiene 192 capas, ofreciendo una buena relación de coste por bit. Además usa un tipo de configuración de memoria de puerta flotante en lugar de trampa de carga lo que puede beneficiar la durabilidad en ciertos casos de uso. La trampa de carga es un sistema orientado a permitir mayor rendimiento con una buena densidad de bits, pero que no siempre es beneficioso para los centros de datos.
Con la mayor densidad de bits que permite la memoria QLC y manteniendo la arquitectura de puerta flotante —se usan transistores para mantener la carga—, la serie D5-P5430 ofrece una relación bastante mejor de densidad y precio. Por cómo funciona internamente, está orientada a lectura más que a escritura, como ocurre con muchas SSD para centros de datos. Aunque se venderá en varios formatos, alcanza los 7 GB/s de lectura secuencial y 3 GB/s de escritura secuencial, así como las 971 kIOPS de lectura aleatoria y 120 kIOPS de escritura aleatoria.
Se venderán unidades que van de los 3.84 TB hasta los 30.72 TB, en varios formatos con interfaz PCIe 4.0 ×4 y protocolo NVME 1.4c. Esos formatos serán U.2, E3.S o E1.S, que son las habituales en centros de datos frente al estándar M.2 de los PC de consumo.
Vía: AnandTech.