Turtle Beach ha anunciado el mando Stealth Ultra con algunas características interesantes que no estaría de más probar para ver si realmente suponen una diferencia en la usabilidad. El mando está diseñado para funcionar inalámbricamente con Xbox, PC, Android, iOS y televisores inteligentes a través de Bluetooth, un cable de tres metros retirable o un receptor inalámbrico.
Cuenta con el diseño estándar de los mandos de Xbox con las dos palancas asimétricas, una cruceta, botonera, botones frontales, gatillos y los botones de control habituales de Xbox, a lo cual se unen cuatro levas en la parte posterior. En las abrazaderas tiene una textura especial para mejorar el agarre, pero además tiene iluminación ARGB.
Lo más llamativo en el frontal es la pantalla LCD a color que se puede usar para configurar al vuelo el mando pero también para recibir notificaciones desde el dispositivo en que se use. Eso incluyen mensajes de WhatsApp, pero también mensajes de estado del PC, por ejemplo. Habría que ver hasta qué punto es configurable. El programa de configuración es Control Center 2, disponible para Xbox, PC, iOS y Android.
Las palancas son interesantes porque no las habituales analógicas sino que recurren a imanes y al efecto Hall para realizar el movimiento y por tanto carece de la necesidad de hacer contacto lo cual reduce el desgaste. Turtle Beach promete en este Stealth Ultra un movimiento suave y sin deriva. Se puede configurar la zona muerta de las palancas y el umbral exterior. La vibración del mando también es configurable.
Los gatillos tienen interruptores para limitar su recorrido, es un tope que cualquier mando de buen precio debe incluir obligatoriamente porque me parece especialmente útil en muchos juegos. Para la botonera recurre a microinterruptores mecánicos lineales para dar una sensación de pulsación mejorada. La toma de audio de 3.5 mm puede activar el habitual oído sobrehumano a los auriculares que se le pongan, pero en la pantalla se pueden seleccionar entre cuatro preajustes de ecualización.
Se adjunta una funda de transporte con una toma USB tipo C que permite recargar el mando mientras está dentro de la funda, pero también se puede sacar el dispositivo de recarga fuera de ella, aunque me parece un sistema superpráctico para que el mando no coja polvo de más.
Su precio es de 200 euros, y se pone a la venta el 15 de diciembre. Me parece un mando que a priori resulta muy interesante, incluso a su PVPR aunque el PVP baje luego, si todo está a la altura.