Los lotes de productos son una constante en el sector de los periféricos para intentar apelar a los que están montándose un nuevo equipo o quieren renovar su teclado y ratón de golpe. En el caso del lote GXT 794 de Trust, está más orientado a los jugones, y es un lote que por su PVPR de 40 euros ofrece un teclado, ratón inalámbrico y alfombrilla. Son unos productos baratos que me suelen gustar probar porque, bueno, no todo el mundo tiene cincuenta euros para gastarse en un ratón, cien en un teclado y otros veinte en una alfombrilla, y ni siquiera la mitad de eso.

Desembalado

Este lote de periféricos de Trust llega en una caja con el azul característico de la compañía, dejando claro que es un lote de tres productos. Aunque no lo pone claro en ninguna parte de la caja, el nombre del producto es GXT 794, que es como se puede encontrar más rápidamente en la web de la compañía. En la parte trasera desglosa los productos como teclado, ratón y alfombrilla, con algunas de sus características.

La caja se abre por un lateral, del que se saca el ratón en una caja propia, el teclado envuelto en una bolsa de papel, y otra caja alargada en la que va la alfombrilla y el cable del teclado. El ratón va también metido en una bolsa de papel junto a su cable, que este sí es retirable. Es positivo que se esté usando papel reciclado y no plástico para proteger los productos.

El teclado es de tipo compacto, con el bloque principal y el de los cursores. La hilera inferior de teclas especiales incluye teclas más alargadas de lo normal y con una cierta curvatura hacia abajo que al menos le da una estética distinta. Incluye tecla FN y otra para activar y desactivar la iluminación RGB configurable en cuatro zonas que incluye.

En la parte derecha en un resalto están los ledes de bloqueo mayúsculas, bloqueo desplazamiento y cursores. En la parte inferior hay una plancha metálica con un único pie de algo más de un centímetro para alzarlo. La altura es adecuada para usarlo sin reposamuñecas. Se conecta mediante un cable de unos dos metros de longitud el cual está forrado de tela trenzada.

En cuanto al ratón, tiene un tamaño algo más grande de lo normal, unos 130 mm de largo y unos 40 mm de alto, por lo que es bastante apto para manos grandes, aunque servirá bien para cualquier tamaño de mano salvo las más pequeñas, y para cualquier tipo de agarre.

Cuenta en el frontal con una toma USB tipo C para recargarlo ya que es un modelo inalámbrico. El receptor USB se guarda debajo del ratón en un hueco que tiene para ello. Debajo también tiene un interruptor con tres posiciones: apagado, encendido y encendido con iluminación ARGB. La forma no es totalmente ergonómica, pero me ha resultado cómodo de usar.

Los dos botones del lateral izquierdo están en una posición un pelín rara, pero es solo cuestión de acostumbrarse. Clican bien y con un ruido bajo, como el de los botones principales. En cada lateral hay un texturizado para mejorar el agarre.

Características

Teclado

El teclado incluye interruptores de tipo domo de goma, por lo que tienen cierta retención lo que mejora la sensación de tecleo y evita pulsaciones involuntarias en juegos más calmados, aunque en los de acción rápida son mejores los interruptores lineales. Pero en estos precios tampoco es que haya nada mucho de ese tipo entre lo que elegir, y menos en un lote económico como este. Su tamaño es de unos 360 mm × 135 mm × 40 mm.

La sensación al tacto de las teclas es bastante buena. Están pintadas en color negro salvo por la inscripción de la tecla, por lo que con el tiempo se podrá desgastar o levantar, lo cual es habitual en este tipo de teclados y en otros más caros. Sobre la durabilidad no puedo decir nada ahora mismo, pero si se le da un uso normal pueden tardar un año en empezar a borrarse, si se le da muchísimo uso, en seis meses se puede empezar a ver el efecto sobre las teclas, mayormente por la grasa de los dedos.

La iluminación del teclado es RGB en cuatro zonas, pero no es configurable. Hay una tecla específica para encender y apagar la iluminación, y se puede aumentar el brillo o disminuirlo en posiciones de 33 %, 66 % y 100 %. La iluminación máxima está bien y debido a las teclas tienen difusores de luz de plástico debajo de ellas pues se ve mucha iluminación aunque no sea el mayor nivel de brillo que he visto en un teclado.

La sensación de tecleo es bastante agradable, y de hecho suelo favorecer los teclados con domo de goma para ello porque suelen conformar teclados más silenciosos (y baratos) que los de interruptores mecánicos tipo MX marrones. De hecho en el equipo con Windows normalmente uso un teclado económico de estos para teclear y jugar. La ventaja de este teclado es que las teclas tienen una altura normal en lugar de una de perfil bajo, que para algunos usuarios también mejorará la sensación de tecleo.

En mi caso lo he notado bastante cómodo, aunque el nivel de ruido es bastante más alto que uno de domo de goma barato para trabajar. Si tecleas muy rápido, el tamborileo de los dedos se va a hacer notar en una sala en la que haya más personas, por lo que tampoco va a ser el mejor teclado para trabajar junto a más personas.

Con la inclinación que tiene el teclado no he tenido problemas y es otro aspecto con el que me he sentido cómodo, aunque tengo las manos grandes. Otras personas que tengan manos más pequeñas deberían encontrarlo igualmente cómodo, por lo que no hace falta reposamuñecas con él.

Ratón

El ratón tiene un tamaño estándar, de unos 120 mm de largo, con ese diseño jugón que se suele usar por alguna razón en ratones económicos. Luego te vas a los de precio medio, sobre 40 o 50 euros, y los ratones ya tienen una forma más normal, y los especialmente caros la tienen supernormal. Es como si las compañías de periféricos baratos entendieran que los que se gastan poco en un ratón lo que quieren es algo de diseño estrambótico y que solo el diseño normal es apreciado por los que tienen dinero. Seguramente esté basado en algún estudio de ventas, pero aun así me gustaría ver ratones económicos con diseños normales y no con estos para jugones.

Dejando eso a un lado, la conectividad inalámbrica funciona a la perfección, y con más que suficiente sensibilidad gracias a su sensor de 4600 PPP. Cuando se lleva un rato sin usarlo el ratón se desactivará hasta que se mueva para ahorrar batería. Tarda en torno a un segundo o dos en volver a reconectar.

La iluminación ARGB tiene un efecto arcoíris que queda bastante bien. En mi caso, he preferido apagarla, también porque así aumenta la autonomía del ratón. Se puede rotar entre ciertos efectos predefinidos pulsando a la vez el botón de retroceder y el botón principal derecho. Son efectos básicos, pero ayudan a personalizarlo un pelín. La iluminación no tiene un nivel muy alto, pero es suficiente como para que se vea bien.

A pesar de que haya criticado antes el aspecto visual del ratón, que no entra dentro de lo que me gusta y por tanto es algo subjetivo, me ha resultado un modelo cómodo de usar y bastante preciso. El botón superior para cambiar la sensibilidad es toda la configuración que tiene y, como ocurre con el teclado, no hay un programa de configuración.

Los botones principales se pueden pulsar bien en cualquier parte de su superifice, aunque en torno a la más cerca al medio del ratón va un poco más duro. Eso puede dificultar el agarre tipo garra con tamaños de mano medianos, pero en general lo veo un ratón que se puede usar bien con palma, yemas o garra. Mi agarre es con la palma, y debido a su tamaño me ha resultado muy cómodo de usar.

También incluye una batería de 500 mAh, que le da una autonomía de unas veinte horas con la iluminación ARGB activada o unas cuarenta sin ella. Es una autonomía correcta, sin alardes, pero que hoy en día casi todo el mundo tiene un cable USB tipo C sobre la mesa, por lo que la autonomía no debería de ser un problema importante.

Alfombrilla

En cuanto a la alfombrilla, acompaña bien a ratón. Tiene 21 cm × 25 cm y unos tres milímetros de grosor, por lo que es más bien pequeña, con una superficie de tela y una base de goma antideslizante. No servirá para los que estén acostumbrados a mover mucho el ratón o por ejemplo se tengan un par de monitores, pero para un equipo normal la veo bien. Para un movimiento normal de muñeca con un monitor y una sensibilidad estándar es una superficie más que suficiente.

Conclusión

El terreno de los periféricos económicos es extenso aunque la calidad de muchos suele dejar bastante que desear. En el caso de los incluidos en este lote de tres, la calidad de fabricación general está bastante bien, y habría que mirar a los extras para ver en dónde está el recorte realizado por Trust. Básicamente en la configuración de los propios dispositivos, que más allá de la iluminación o la sensibilidad del ratón carece de ella.

Pero los productos son bastante buenos para el público al que van. El teclado tiene una buena calidad de fabricación con una buenas teclas, con ruido moderado imitando a los mecánicos, y unos domos de goma con ligera retención que dan buena sensación de tecleo.

El ratón también tiene una calidad más que decente, tirando incluso a buena, aunque el diseño no me termine de gustar. Tiene buena precisión y una ergonomía suficiente, aunque la posición de los botones laterales no me termine de gustar. Pero cumple a la perfección con su cometido. La alfombrilla, aunque pueda parecerle pequeña a muchos, tiene igualmente buena calidad.

El problema fundamental de estos periféricos baratos suele ser la durabilidad, pero eso no lo puedo valorar con una semana de uso. Lo único que puedo decir es que los tres productos del lote GXT 794 tiene buena calidad de fabricación y que deberían de aguantar un tiempo razonable. Las teclas del teclado es de imaginar que a los seis meses o al año empezarán a borrarse, que es lo normal en este tipo de teclas.

Por un PVP de unos 35 euros por el lote, no le puedo poner pegas a los tres productos. No son el teclado y ratón más jugones que he probado, pero también son al menos iguales en calidad a teclados de 30 o 40 euros, y ratones sobre los 20 o 30 euros, en lo cual incluye modelos de la propia Trust.