Durante el día de Navidad, un grupo autodenominado Lizard Squad procedió a amargarles la fiesta a los nuevos propietarios de una Xbox One y PlayStation 4. Los usuarios no pudieron conectar a las redes online de Microsoft y Sony, y por tanto los MMO estaban inaccesibles y tampoco se podía realizar la configuración completa de la consola.
Los ataques se detuvieron cuando Kim Dotcom les ofreció a Lizard Squad suscripciones de por vida a Mega. La investigación llevada a cabo por la policía británica y el FBI ha llevado al arresto de un adolescente como uno de los supuestos participantes en los ataques. Aunque se encuentran en la primera parte de la investigación, están redoblando esfuerzos para meter en la cárcel a los responsables de los ataques.
Al joven se le acusa de cometer ataques de denegación de servicio en las redes de Xbox y PlayStation en 2014, además de realizar llamadas falsas a los servicios de emergencia.